Crean en un pueblo de Lleida trampas legales contra ladrones

Un grupo de investigadores y miembros de una productora audiovisual domiciliada en el L’Albagés acaban de lanzar el proyecto Disuasión Creativa, una propuesta de escarmientos contra ladrones reincidentes de las zonas rurales de Lleida. Concretamente, se instalan trampas legales, muchas procedentes de los juegos escape room, para asustar a delincuentes que perpetran básicamente robos en almacenes agrícolas y granjas. Carteles amenazantes, polvos pica-pica, espray pimienta, bombas fétidas, clavos contra neumáticos, nubes de humo de glicerina e incluso tinta que mancha la piel durante semanas son algunas de los métodos que se pueden llegar a instalar en itinerarios previamente estudiados y con la presencia de sensores para monitorear el paso de los ladrones a tiempo real.

Se trata de medidas legales que buscan la disuasión y evitar la reincidencia. “Hay muchos vecinos de pueblos pequeños que están muy agotados por los robos continuos en sus propiedades”, argumentan responsables del proyecto, que reconocen que las alarmas y las cámaras de videovigilancia ya no son obstáculos para delincuentes en propiedades aisladas. El presupuesto de actuación de esta empresa puede variar de los 500 a los 4.000 euros, según su sofisticación.

La iniciativa, que arrancó a principios del pasado verano, ya se ha llevado en media docena de explotaciones y almacenes agrícolas de Les Garrigues, como Cervià, El Soleràs y L’Albagés pero también en Olius (Solsonès) y confían en evaluar su efectividad en los próximos meses. “Estamos todavía en período de pruebas y, en meses, analizaremos si los ladrones reinciden”, argumentan. Disuasión Creativa está amparado dentro de Rastrejadors.cat, una página web que vende los servicios de investigación informática para aquellos usuarios de internet que temen ser estafados en la red.