Mollerussa devuelve a vecinos del Sant Isidori el IBI de dos edificios derribados

El ayuntamiento de Mollerussa devolverá parte del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a antiguos habitantes de los bloques A y C del grupo Sant Isidori, que lo pagaron el año pasado a pesar de que estos edificios ya habían sido derribados. Estos vecinos pagaron 50 euros, de los cuales se les devolverán los 35 que corresponden al valor de las construcciones, dado que estas ya no existían. El consistorio conservará en cambio los 15 euros que corresponden al valor del suelo, ya que los vecinos siguen siendo propietarios de los terrenos. La devolución se plantea una vez se ha tramitado la certificación de los derribos y el catastro ha ratificado que en los terrenos no hay construcción alguna. La zona donde se alzaba el grupo de viviendas de Sant Isidori ya es solo un solar vacío. La empresa adjudicataria de las demoliciones ha retirado los escombros y los ha reciclado. Se utilizarán para hacer reparaciones en caminos, en concreto de la zona de La Serra. La devolución del IBI de los edificios demolidos no será automática. Los vecinos deberán presentar una reclamación ante el organismo de recaudación de tributos de la Diputación, que gestiona este impuesto por encargo del ayuntamiento. Lo mismo tendrán que hacer los habitantes de los bloques B y D, los últimos del grupo Sant Isidori que fueron derribados: deberán pagar el gravamen y reclamar la devolución al año siguiente, en 2023. Cabe recordar que los bloques de pisos B y D fueron declarados en ruina en octubre del 2020, estaban deshabitados desde julio de 2021 y fueron derribados recientemente. En abril y septiembre del año pasado se finalizó la demolición de los bloques A y C, que conformaban el conjunto de 160 viviendas del grupo Sant Isidori, ya desaparecido.