INFANCIA MALOS TRATOS
Hospitales de Lleida detectan 48 casos de abusos a niños en nueve meses
Son la mitad de los 94 episodios de maltrato infantil detectados por estos centros
Los hospitales leridanos han notificado un total de 48 casos de abusos sexuales a niños y adolescentes entre los meses de enero y septiembre de este año. Supone un 65,5% más que en todo el año pasado y cuatro veces más que en 2020. La violencia sexual supone la mitad de los 94 episodios de maltrato infantil detectados este año en estos centros.
Los casos de abuso sexual a niños detectados por los hospitales de las comarcas leridanas se han disparado en los últimos años, periodo en el que también han mejorado los sistemas de detección y de atención para aflorar cualquier tipo de maltrato infantil. Según el Registro Unificado de Maltratos Infantiles (Rumi-Hospitals), cuyos datos gestiona la conselleria de Derechos Sociales, en los nueve primeros meses de este año los hospitales notificaron un total de 48 casos de abuso sexual (también sospechas) a menores en la provincia de Lleida, de los que una quincena son niños y niñas de 2 a 9 años. Esto supone un aumento del 65,5% respecto a los casos detectados en todo el 2021, cuando fueron 29, y cuatro veces más que los notificados en el conjunto del 2020, con 11.
También se han disparado respecto a antes de la pandemia, cuando se detectaron 13 casos entre los meses de enero a noviembre. Según este registro, tres de las posibles víctimas tenían entre 2 y 5 años; doce, entre 6 y 9 años; 15, entre 10 y 13 años, y 18 de los menores tenían entre 14 y 17 años. Por sexo, 37 eran niñas y 11, niños.
Asimismo, los hospitales notificaron ocho casos de abuso considerados de especial gravedad, así como otros 24 moderados y 16, leves. La violencia sexual representa la mitad de los casos de maltrato infantil detectados este año en la provincia. En total, entre enero y septiembre se han notificado 94 casos de maltrato, considerando que un mismo niño o adolescente ha podido sufrir más de un tipo de agresión al mismo tiempo (ver desglose).
Entretanto, los Mossos seguían buscando ayer al hombres investigado por la presunta agresión sexual a una niña de 15 años en Alpicat, como avanzó SEGRE. El supuesto autor, que está identificado, habría amenazado a la menor y se fugó al saber que sería denunciado.
Una veintena de casos de maltrato grave y uno de sumisión química
El Registro Unificado de Maltratos Infantiles (Rumi-Hospitals) señala que en los nueve primeros meses del año los hospitales leridanos han notificado (entre sospecha y certeza) un total de 94 casos de maltrato infantil, de los que 23 se consideraron de especial gravedad.
Concretamente, entre enero y septiembre los profesionales sanitarios detectaron 21 casos de maltrato psicológico-emocional, siempre teniendo en cuenta que un menor ha podido ser víctima de más de un tipo de maltrato a la vez. De estos, seis episodios fueron considerados graves. Asimismo, se registraron diez casos de maltrato físico, uno de ellos grave y otros seis calificados de moderados, así como otros diez por negligencia, la mitad de ellos de gravedad.
Asimismo, se notificaron cuatro episodios de maltrato prenatal, cuando la madre estaba embarazada, de los que tres fueron calificados como graves por los sanitarios, y un caso tipificado como leve de sumisión químico-farmacéutica.Según la última memoria de la Fiscalía de Lleida, el año pasado se abrieron diligencias contra 36 padres por maltrato hacia sus hijos, mientras que en 2020 fueron 57 y en 2019, un total de 86. En el caso de los abusos, recuerda que en cerca del 80% de los casos, el agresor es un familiar o una persona cercana a la víctima. El pasado febrero fue detenida una joven pareja de Artesa de Segre acusada de causar la muerte de su bebé de tres meses.
El juez decretó su ingreso preventivo en prisión. Entretanto, el pasado julio, el juez imputó por homicidio a una joven de 22 años que unos días antes había dado a luz en un piso de La Bordeta a un bebé que su suegra halló muerto horas después. La joven fue detenida por los Mossos d’Esquadra y el juez decretó su puesta en libertad provisional con medidas cautelares como la retirada del pasaporte.