SUCESOS TRÁFICO
Circula ebrio y con una mujer a la que no podía acercarse
Los Mossos detienen a un conductor que se accidentó en Arbeca || Tenía una orden de alejamiento de una de las ocupantes
El conductor de 22 años que el pasado domingo salió de la vía y acabó volcando en Arbeca en u accidente que se saldó con tres heridos –incluido él– acabó siendo detenido por los Mossos d’Esquadra porque circulaba en estado ebrio y quebrantando una orden de alejamiento porque una de las pasajeras era una mujer a la que tenía prohibido acercarse, según ha podido saber este periódico. El infractor también tiene antecedentes penales. El accidente ocurrió minutos antes de las nueve de la mañana.
Varios testigos vieron un turismo con tres ocupantes circular gran velocidad por la carretera L-200 procedente de Les Borges Blanques. Su conducción era errática y chocó lateralmente con otro vehículo pero, en lugar de detenerse, siguió su recorrido varios metros más por un carril en sentido contrario hasta conectar con la carretera C-233, en dirección a Arbeca y, finalmente, tomar el vial hacia Mollerussa. El turismo acabó despeñándose sobre un campo de cultivo cerca de la capilla de Sant Miquel de les Borgetes.
Los tres ocupantes resultaron heridos de diversa consideración (ver SEGRE del 10 de octubre). Los Mossos d’Esquadra, que ya habían movilizado una patrulla tras ser alertados previamente por varios conductores, acudieron al lugar del accidente y efectuaron al conductor una prueba de alcoholemia, que arrojó una tasa de 0,68 miligramos por litro de aire, casi el triple de la máxima permitida (0,25). Además, los policías comprobaron que el conductor tenía antecedentes penales e incluso le constaba una orden de alejamiento contra una de las dos pasajeras.
De hecho, una de ellas fue trasladada al hospital Arnau de Vilanova de Lleida con pronóstico reservado al presentar síntomas de desorientación tras el accidente. Se da la circunstancia que varias grúas intentaron retirar sin éxito el vehículo debido al mal estado del suelo. Los Mossos acordonaron el coche para que fuera finalmente retirado unos días después, aunque no se pudo evitar que desconocidos saquearan los objetos que había en su interior.