ESNOTICIA
La Granja d'Escarp recuerda el peor lunes de su historia
Una exposición muestra los estragos que causó el río, que llegó a una altura de 2,60 metros en la parte baja del pueblo
Niños de 1982 se buscan en las imágenes de la exposición.
La Granja d’Escarp inauguró ayer una exposición conmemorativa de la riada de 1982, que recuerda cómo afectó el desbordamiento del meandro fluvial que rodea el pueblo hace 40 años. La muestra, instalada en el centro cívico Lo Ball, se podrá visitar hasta el próximo domingo. Se trata de una exposición que incluye fotografías, diapositivas, una película y recortes de prensa cedidos por los vecinos.
El acto fue presidido por el alcalde, Manel Solé, y la periodista de SEGRE Anna Sàez. Una marca situada a una altura de 2,60 metros en Lo Ball indica hasta dónde llegó el agua en la parte baja del pueblo, que tuvo que desalojarse. Y es que La Granja no vivió una, sino dos riadas superpuestas.
Primero se desbordó el Cinca. Horas después, el Segre, recuerda Ramon Mariné. En una casa de la avenida de Lleida el agua se arremolinó y amenazaba con destruir la vivienda.
“La Guardia Civil pidió una escopeta de caza porque sus armas hacían agujeros demasiado pequeños y había que romper una ventana para dar una salida al agua y aliviar la presión. Como ningún agente sabía usarla disparé yo”, explicaba ayer José Sáez. Fueron días de angustia, pero también de solidaridad en los que todos los vecinos palearon barro.
Niños de 1982 se buscan en las imágenes de la exposición.
