ESNOTICIA
La competencia de Francia se suma a la dificultad para atraer médicos al Pirineo
Este país ofrece mejores condiciones laborales y salariales a los facultativos
Los ambulatorios y hospitales del Pirineo llevan años con dificultades para atraer a médicos y ahora deben afrontar el problema que supone el hecho de que en Francia las condiciones laborales y salariales que se ofrecen son mucho mejores. Responsables sanitarios del Pirineo alertan de que esto puede ser un nuevo problema.
Las mejores condiciones laborales y salariales de los profesionales de la medicina en Francia son cada vez más un atractivo para los facultativos y, entre ellos, los que ejercen o lo han hecho en el Pirineo.
Vladimir Lazo, director asistencial de la Fundació Sant Hospital (FSH) de La Seu d’Urgell, explica que el país vecino ofrece una retribución más elevada y una “mayor consideración profesional”. “Muchos estudiantes, antes de empezar la especialidad, ya estudian idiomas porque dentro de sus planes está la posibilidad de marchar”, señala. “Si la gente se va a Alemania, ¿por qué no se va a ir a Francia, que está más cerca?”, se pregunta.
Sin obviar las dificultades que puede suponer el idioma o la familia, está claro que “para un médico que acaba de salir de la facultad, sin cargas familiares, el proyecto es muy atractivo”, admite Lazo. El desequilibrio retributivo agrava la escasez de profesionales en las zonas de montaña catalanas, también en las de Lleida, en un contexto complicado, ya que el que el 20% de los médicos se jubilarán en los próximos cinco años. El director asistencial de la FSH precisa que a día de hoy “tenemos la estructura de personal médico completa [solo hay una vacante para el centro sociosanitario que está en proceso de contratación], pero mañana no sabemos lo que pasará porque es evidente que tenemos un problema para retener a nuestros profesionales”.
El hospital cuenta con una plantilla de 34 doctores, sin tener en cuenta los del área de materno-infantil, que están gestionados por la cooperativa Pediatria dels Pirineus. Lazo hace referencia también a la falta de profesionales del área de enfermería. “Hoy por hoy tenemos un mayor problema para cubrir las plazas de enfermería que las de médico”, aseguró.
A nivel de toda la provincia, unos 400 profesionales, uno de cada cinco, se jubilarán antes del año 2027, según datos del Colegio de Médicos de Lleida. Más que su número, el principal problema es que el volumen de plazas de Médico Interno Residente (MIR) que ha habido en los últimos años para formar a los nuevos facultativos es insuficiente para poder cubrir las vacantes que se irán produciendo a corto plazo, que afectan en mayor medida a las zonas rurales (más información en página 4).Precisamente, ante esta situación el Colegio de Médicos apuesta por una modalidad de contratos territoriales, integrando a especialistas del Pirineo en el hospital Arnau de Vilanova, por ejemplo, de forma que unos días de la semana estarían en un hospital comarcal y los otros, en el Arnau. En otro orden, la especialidad que tienen una mayor lista para visitas en el Sant Hospital de La Seu es la de Neurología.
A pesar de que la ha reducido aumentando las horas de consulta la demora todavía es de 100 días, frente a los 175 de hace algunos meses, detalló Lazo. “Excedemos el tiempo de garantía máximo que fija el CatSalut, que es de 90 días para visitas ordinarias y de 30 días para las primeras, pero dependemos de centros externos que tienen los mismos problemas que nosotros”, lamentó el director. En Reumatología es de 69 días y en Cardiología, de 27 días.
“Trabajo 35 horas en 4 días y gano más que cuando hacía 80 horas aquí”
Julián Martín, médico de 59 años, había trabajado entre Andorra, Manresa y el hospital de La Seu. Desde hace 10 años es médico del trabajo en el sureste de Francia (en la Provenza), aunque dos veces al mes viene a La Seu para ejercer como médico de familia y de urgencias en el Sant Hospital. Decidió irse a Francia “inicialmente motivado por el proyecto económico”, que le permitiría mejorar su calidad de vida, pero después descubrió “una mejor consideración profesional”.
Recuerda que la adaptación “fue dura”, porque pasó los primeros seis meses sin su familia, hasta que llevaron a cabo la agrupación familiar. Sobre todo, destaca que las condiciones laborales no tienen nada que ver con las que tenía en Catalunya. Ahora atiende a 15 pacientes al día y trabaja 4 días a la semana.
Antes trabajaba dos jornadas completas, que representaban “un mínimo 80 horas a la semana, con guardias y fines de semana en activo”, y atendía a “una media de 60 pacientes al día”. El salario “es más del doble y el contenido del puesto de trabajo es también más interesante”, reconoce. Los médicos jóvenes en Francia, según Martín, “empiezan con una retribución de unos 60.000 euros al año”, mientras que los “sénior”, como es su caso, con más experiencia, reciben “entre 100.000 y 120.000”.
El cambio requiere “un esfuerzo y un salto de idioma importante, pero compensa, sin duda alguna”, señala. Añade que Francia busca médicos para contratar “de inmediato” y que el nivel mínimo de francés para trabajar es el B2.