El Supremo ratifica la inhabilitación de Bernat Solé, que deja el Govern y vuelve a la docencia

El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la inhabilitación durante un año del delegado de la Generalitat en Lleida, Bernat Solé (ERC), por un delito de desobediencia por su participación en 2017 en el referéndum de independencia del 1-O, cuando era alcalde de Agramunt. El fallo rechaza el recurso contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya y le impone una multa de 16.800 euros. Es el segundo alcalde de Lleida inhabilitado por el procés después de Miquel Serra, que fue primer edil de Alcarràs en el mandato anterior.

Sin embargo, Solé es el primero que ocupa un cargo público en el momento de ratificarse la sentencia en su contra. Solé deberá dejar su cargo en la Generalitat, y anunció que “volveré a mi profesión y vocación como profesor de Tecnología”. Aseguró que “la represión sigue y persiste” contra el independentismo y pidió “que nadie tenga la tentación de juzgar mi inhabilitación como un fracaso de la mesa de diálogo, porque la lucha contra la represión va mucho más allá de una, dos o tres personas: va de un país entero, de derechos y libertades individuales, pero sobre todo colectivas”.

Solé afirmó que dejará su cargo “por la sentencia de un tribunal sumergido en la arbitrariedad, porque nada de lo que hice y de lo que se me acusa es diferente de lo que hicieron la mayoría de alcaldes de Catalunya”. Todo apunta a que la actual jefa de su oficina, Montse Bergés, asumirá el cargo de delegada del Govern en Lleida.Solé hizo estas declaraciones durante una comparecencia pública en la que recibió el apoyo de decenas de alcaldes, electos y militantes de ERC, Junts y PDeCAT, entre ellos la consellera de Acción Exterior, la republicana Meritxell Serret. En este acto, hizo un repaso de su labor como alcalde de Agramunt, diputado en el Parlament, conseller de Acción Exterior y delegado de la Generalitat.

El President, Pere Aragonès, lamentó que la represión haya vuelto a poner en el punto a mira a cuatro servidores públicos “por su compromiso con la libertad de Catalunya y el 1-O”, en referencia a Solé, Natalia Garriga, Josep Maria Jové y Lluís Salvadó (más información en la página 18).

Concentración en Agramunt con más de cien personas

Más de un centenar de personas se concentraron anoche en la plaza de la Església de Agramunt para mostrar su apoyo a Bernat Solé, horas después de confirmarse su inhabilitación. Solé aseguró que la sentencia del Tribunal Supremo es “totalmente arbitraria” y recordó con “orgullo” el día del referéndum.

En la movilización, donde se leyó un manifiesto de apoyo a Solé, recordó los días anteriores y posteriores al 1-O. La actual alcaldesa de Agramunt, Sílvia Fernàndez, afirmó que “esta condena es una vergüenza” y aseguró que “si condenan a Bernat, nos condenan a todos los agramuntins”. También apuntó que “no podrán parar la voluntad de todo un pueblo”.

Finalmente, Oriol Puebla, que acompañó a Bernat Solé en uno de los equipos de gobierno del ayuntamiento de Agramunt, dijo que “hoy es un día triste para la democracia”.La concentración reunió a buena parte de los concejales que han formado parte del ayuntamiento de Agramunt en los diez años en los que Solé fue alcalde. El acto contó con la participación del presidente de la Diputación, Joan Talarn, y la directora general de Administración Local, Montserrat Fornells. También acudió buena parte de los alcaldes del Urgell, entre ellos los de Tàrrega, Bellpuig, Anglesola o Castellserà.