FAUNA SALVAJE
La reintroducción del lince, en el Urgell y con planes contra la plaga de conejos
La reintroducción del lince ibérico en Lleida, en estudio desde hace dos años, se plantea ahora en el Urgell y su entorno, donde los conejos causan graves daños a cultivos. Estos felinos son su depredador natural, pero no bastarán por sí solos para controlar la plaga. El proyecto para recuperar esta especie protegida propone también otras medidas para frenarla.
Los primeros estudios para reintroducir el lince ibérico en Lleida proponen liberarlos en el norte del Urgell y su entorno en la Noguera y la Segarra, donde la elevada proliferación de conejos provoca importantes daños a la agricultura. Estos felinos son su depredador natural, pero no bastarán por sí solos para controlar la plaga. Por este motivo, la reintroducción de esta especie protegida deberá ir acompañada de medidas adicionales para reducir la población de conejos. Así lo explicaron miembros de Crew Foundation, una de las entidades que llevan a cabo desde hace casi dos años estudios sobre el terreno para preparar el retorno del lince.
Los estudios previos a la reintroducción, financiados por el Estado, durarán un año más, por lo que la liberación de linces no se planteará al menos hasta 2024. Inicialmente se valoró hacerlo en Mas de Melons, en Les Garrigues y el Segrià. Sin embargo, la abundancia de conejos, principal alimento del lince, convenció a Crew Foundation de que el norte del Urgell y su entorno son un lugar idóneo para establecer una población viable de estos felinos.
Allí plantean liberar ocho, en su mayoría hembras, aunque la cifra dependerá de la disponibilidad en centros de cría o la posibilidad de capturarlos en el medio natural para trasladarlos. “Un lince come uno o dos conejos al día y provoca que se dispersen y disminuya su concentración”, explican Xavier Rovira y Antares Bermejo, de Crew Foundation. Ambos coinciden en que estos felinos no bastarán para frenar la rápida proliferación de conejos.
Acompañar la reintroducción de medidas adicionales para controlar la plaga pretende favorecer la aceptación social del proyecto e implicar a la población local.Estas medidas incluyen vallas electrificadas (pastores eléctricos), barreras de cultivos para que los conejos se alimenten de ellos y no dañen las cosechas y abonos que los repelen, entre otras. Complementan a la caza, las trampas y otras medidas que se han aplicado hasta ahora en Lleida y han sido probadas en Castilla-La Mancha y Extremadura, en el marco de un programa de prevención de daños por conejos financiado por la UE.
Un animal único para estimular el ecoturismo y mejorar la caza
Crew Foundation defiende la reintroducción del lince ibérico en las comarcas del llano de Lleida como una oportunidad de estimular el ecoturismo, gracias al atractivo que supone una especie protegida que no puede encontrarse en ninguna otra parte del planeta. Actualmente su población se limita al sur de la Península. Asimismo, la entidad recalcó que la presencia de este felino no interfiere en actividades como la agricultura, la ganadería o la caza. En el caso de esta última, apuntó que el lince contribuye a aumentar las poblaciones de perdices en las zonas donde se establece, debido a que ahuyenta a los zorros, los principales depredadores terrestres de estas aves.
Una especie que se recupera tras llegar al límite de la extinción
Restos óseos acreditan la presencia del lince ibérico en Catalunya siglos atrás, pero se deconoce con exactitud cuándo desapareció del territorio catalán. En el conjunto de la Penísnsula Ibérica llegó al límite de la extinción a principios de siglo: en el año 2002 quedaban menos de un centenar de ejemplares. Desde entonces, programas de cría y reintroducción han conseguido elevar su censo a más de 1.300 individuos, si bien todos se concentran por ahora en el sur de la Península, en Andalucía, Castlla-La Mancha, Extremadura y Portugal. Este animal es de un tamaño y peso menor que el lince boreal, presente en diferentes países europeos.