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Juneda tendrá una sala aconfesional en 2023 para despedir a los difuntos
Este nuevo equipamiento se instalará cerca del cementerio y costará 390.000 euros
El ayuntamiento de Juneda tendrá una sala aconfesional para despedidas de difuntos que se ubicará en una zona próxima al cementerio municipal. Podrá acoger tanto funerales laicos como los de cualquier confesión religiosa. El consistorio ha dado luz verde a este equipamiento para atender a la creciente demanda de ceremonias civiles por parte de familias que quieren personalizar el último adiós a sus allegados, según explicó el alcalde, Antoni Villas.
El proyecto, que llevará a cabo el propio consistorio, prevé la construcción de un nuevo edificio en la zona de la calle Teuleria, al lado del camposanto y que cuenta con una gran zona de aparcamiento. “El objetivo es disponer de una gran sala diáfana para todos aquellos que prefieren otro tipo de despedida de sus seres queridos, más allá del funeral católico”, dijo. Villas recordó que el municipio dispone ya de un equipamiento para acoger los velatorios.La sala para despedir a los difuntos supondrá una inversión de 390.000 euros y el consistorio cuenta con una ayuda de la Diputación de 102.000 euros.
La previsión es que las obras se inicien el primer trimestre de 2023. Incluirá una oficina administrativa y una sala polivalente para dar el último adiós a los fallecidos. Por otra parte, la elevada demanda de vecinos de Juneda que quieren elegir su lugar preferido de entierro llevó al consistorio a adjudicar por sorteo la mitad de los nuevos nichos que se habían construido en el camposanto.
Más de una treintena de personas participaron el pasado mes de julio en el sorteo de nichos de nueva construcción, en dos pabellones con 60 nichos y 20 columbarios para urnas. La otra mitad se adjudicó por orden de petición.