La ministra de Transportes asegura que la apertura de la A-27 en el Coll de Lilla será “en menos de un año”
Sánchez evita concretar la fecha de la finalización de las obras, aunque la previsión era acabarlas a inicios del 2023
La ministra Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado que las obras del túnel del Coll de Lilla de la A-27 estarán terminadas en "menos de un año". Sánchez no ha especificado la fecha de la apertura|abertura de este tramo de 5,5 kilómetros en la visita de obras hecha este viernes. El exministro Ábalos afirmó que lo estarían a principios del próximo año. Con todo, Sánchez ha reivindicado que en cuatro años se ha adelantado muchísimo en una actuación de "gran complejidad". Al mismo tiempo, ha defendido que la nueva vía supondrá un revulsivo económico por el territorio y mejorará la calidad de vida de los ciudadanos. La ministra también ha indicado que se están tramitando las indemnizaciones de los afectados por las grietas del pueblo de Lilla.
Sánchez ha asegurado que el nuevo tramo de la A-27 "mejorará la seguridad y la movilidad en la zona" de un trazado que hoy por hoy se hace a través de la N-240. La responsable de Transportes ha insistido en que será "una infraestructura motor" para el desarrollo económico de la zona. "Es importante para Tarragona, para Lleida, por Aragón, el Ebro y el puerto de Tarragona", ha dicho. La socialista ha recordado también que se reducirá el tiempo de trayecto: "hoy los vehículos pesados tardan dieciséis minutos en cruzar por la N-240, y mañana tardarán sólo dos minutos". Por eso, ha apuntado que esta nueva infraestructura "contribuirá a reducir el consumo energético, los combustibles y el coste del transporte".
La ministra también ha lamentado la "angustia" y el "susto" que causaron las grietas a los vecinos del pueblo de Lilla provocadas por las voladuras hechas por la empresa Acciona en el tramo final del recorrido. Sánchez ha explicado que las indemnizaciones ya se están tramitando, pero no ha detallado los plazos ni los importes que cobrarán los afectados. Sí que ha asegurado que están trabajando "para que se resuelva cuanto antes mejor esta situación". Las voladuras provocaron daños en unas 90 casas de Lilla.
Obra "larga y compleja"
En su intervención, Sánchez ha afirmado que la obra ha sido "larga y compleja". La actuación empezó en 2008, pero con la crisis financiera y sin presupuesto, quedaron paradas. Finalmente, en 2019 se iniciaron las obras del túnel que conectará Valls y Montblanc, unos trabajos largamente reivindicados por el territorio. En marzo de 2021, se caló la infraestructura con un presupuesto inicial que superaba los 100 millones de euros. El año anterior, arrancó la actuación en la boca norte del túnel, con las voladuras correspondientes a los pies del pueblo de Lilla, que causaron grietas. La conexión hace 5,5 kilómetros y dispone de dos túneles de 1.500 metros, uno para cada sentido de la marcha.