SUCESOS INVESTIGACIÓN
Hallan en una arqueta en Torres de Segre el cadáver de un desaparecido
Los compañeros de la víctima, que lo vieron por última vez el día 27, lo encontraron ayer por la mañana || Los Mossos apuntan que se trata de una muerte accidental
Los Mossos d’Esquadra abrieron ayer una investigación tras localizar en una arqueta de Torres de Segre el cadáver de un hombre desaparecido desde hacía una semana. Según informaron los servicios de emergencias, los Bomberos y la Policía catalana fueron activados sobre las 11.30 horas tras localizarse el cuerpo sin vida de un hombre en un camino rural en el término municipal de Torres de Segre, a escasos metros del municipio de Alcarràs. Fuentes policiales confirmaron que se trataba de un individuo cuya desaparición habían denunciado sus compañeros el pasado 27 de enero.
Fueron sus amigos, precisamente, quienes encontraron el cuerpo ayer por la mañana. Se encontraba en el interior de una arqueta de riego en una finca privada y, a falta de la autopsia, todo parece indicar que se trata de una muerte accidental. Los compañeros del fallecido explicaron a este diario que la última vez que lo vieron fue el 27 de enero sobre las once de la noche.
Entonces, presentaron denuncia por desaparición ante la Policía Local y los Mossos d’Esquadra. Fuentes próximas señalaron que se trata de un hombre de origen africano que no tenía un domicilio conocido y que se movía entre diferentes municipios del Baix Segre. La autopsia determinará las causas de la muerte, que podría ser por un golpe en la caída.
En 2021, los Mossos d’Esquadra registraron un repunte en el número de denuncias por desapariciones en las comarcas leridanas, ya que 2020 estuvo marcado por una menor actividad por la pandemia, superando las de antes de la Covid. Así, se contabilizaron 255 denuncias, lo que supone una media de casi cinco casos conocidos a la semana. Así, la cifra aumentó un 49% con respecto a 2020 y un 23% respecto a 2019.
Del total de denuncias por personas desaparecidas en la provincia de Lleida, cerca de la mitad fueron de menores de edad, en su mayoría adolescentes de entre 13 y 17 años. En el conjunto de Catalunya, los Mossos señalan que el 98% de las denuncias se resuelven y que en el caso de los adolescentes, un 74% reinciden. La Policía catalana cuenta con una unidad específica para acompañar a familiares y allegados.