La temporada de pesca arranca con más limitaciones y un pez protegido

La temporada de pesca comenzó ayer en Lleida, con la apertura del periodo hábil para pescar baja montaña. Este año incluye nuevas limitaciones que tienen como fin preservar los peces autóctonos. Así consta en la resolución que emite cada año la Generalitat para regular esta actividad deportiva.

Entre sus novedades destacan la prohibición de llevar a cabo competiciones en espacios naturales protegidos y el veto a capturar ejemplares de madrilla, un pez autóctono que años atrás se podía ver con frecuencia en los ríos leridanos y que actualmente está en declive. Fuentes del departamento de Acción Climática corroboraron que la madrilla “ha pasado de de ser pescable a una especie protegida” y que se prohíbe cualquier concurso de pesca en los parques y reservas naturales, donde se habían celebrado competiciones en años anteriores. El límite de capturas de trucha autóctona se ha reducido y pasa de cuatro a tres al día en áreas de pesca dentro de espacios protegidos y reservas genéticas de esta especie.

Además de las nuevas normas, el deshielo temprano por el calor de las últimas semans condiciona también el inicio de la temporada de pesca. Miembros del Club de Caça i Pesca de l’Alt Urgell creen que será más corta de lo habitual por este motivo. “La primavera se ha anticipado y el deshielo es muy elevado, como el que suele haber en mayo”, indicaron.

Temen que en junio “ya no tendremos agua para pescar y habremos acabado la temporada dos meses antes” que en años anteriores.