Más de 3 millones de la Diputación para rehabilitar 63 viviendas en 43 pueblos

La Diputación destinará más de 3 millones de euros a ayudas que permitirán rehabilitar 63 pisos en 43 pueblos y destinarlos a alquiler social. Así lo anunció ayer el vicepresidente primero de la corporación, Jordi Latorre, en el primer Congrés Català de Repoblament y recordó que estas subvenciones se enmarcan en las ayudas para proyectos contra el éxodo rural.

Están dotadas con 7 millones e incluyen otras dos líneas: una para contratar técnicos que desarrollen proyectos y otra para iniciativas que ya estén en marcha. Latorre señaló que estas ayudas se resolverán próximamente y aseguró que “queremos que Lleida deje de ser la capital de la despoblación”. Las jornadas reúnen entre ayer y hoy a 300 electos y técnicos para debatir iniciativas para luchar contra la pérdida de población.

El presidente de la Diputación, Joan Talarn, aseguró que, debido a los criterios de discriminación positiva, en este mandato las comarcas que han recibido una mayor inversión de la corporación son las más afectadas por la despoblación, como Les Garrigues, el Jussà o la Segarra. También recordó que el reto demográfico “es un problema de todo el país” y combatirlo implica políticas “transversales” entre todas las administraciones. El congreso gira entorno a tres grandes ejes: el desarrollo rural, los servicios y la vivienda.

Ayer tuvo lugar la mesa redonda sobre este último tema, en la que Sebastià Mata, teniente de alcalde de Maldà y conseller de Repoblación del Urgell, explicó que “estamos en una situación muy crítica, en la que el derecho de acceso a la vivienda se vulnera en toda Catalunya y especialmente en el mundo rural” y hay “pocas políticas” en esta materia en los pueblos. Expuso iniciativas como la reconversión de la antigua casa del médico en pisos de protección oficial para jóvenes o la cooperativa de vivienda. Mientras, Anna Pla, de la diputación de Girona, expuso las ayudas que ofrecen a proyectos locales de vivienda. Asimismo, Nydia Tremoleda, experta en rehabilitación, presentó el proyecto con el que se han reformado edificios municipales en Vallcebre (Berguedà) para que acojan pisos.

“Preservar la payesía es una obligación de la sociedad”

“Preservar la payesía es una obligación de la sociedad”. Así lo aseguró ayer Imma Puigcorbé, ganadera, veterinaria y activista, en una de las mesas redondas del Congrés de Repoblament. Reivindicó que el sector primario “alimenta a la población, hace una gestión del territorio y cumple una función social y medioambiental”. Por ello, reclamó sueldos dignos y señaló que “no es normal que haya la misma legislación” para la gran industria agroalimentaria que para las pequeñas explotaciones. El debate, que moderó la periodista Núria Sirvent, también contó con la participación de Marta Lloret, impulsora del proyecto Masiaire. Este consiste en la recuperación y rehabilitación de masías a través de la masovería y fomentar así la repoblación. Destacó que ya han cerrado 16 acuerdos y cuentan con un total de 35 casas. También pidió más celeridad burocrática. Por su parte, Marta Lluvich, periodista y promotora de la Botiga més petita del món en Altron, señaló que su proyecto demuestra que “haciendo cosas pequeñas, donde los resultados se vean de forma rápida, se puede cambiar y dinamizar socialmente un territorio”.

Superar los localismos y trabajar en red para conseguir más servicios

Superar los localismos y trabajar en red entre diferentes ayuntamientos es la única forma de conseguir más servicios y garantizar la supervivencia de los pequeños pueblos. Esta es la principal conclusión de la segunda jornada sobre repoblación del mundo rural que debe crear una “nueva ruralidad” más allá de los propios pueblos y fomentar atractivos que mantengan a los vecinos y atraigan a nuevos. Un ejemplo de estas iniciativas es la creación de la Comunitat de Municipis del Segrià Sec, que reúne a Almatret, Lardecans, Maials, Torrebesses, Sarroca y pronto Aspa para impulsar proyectos turísticos, agrícolas y de patrimonio con el fin de mantener y atraer nuevos vecinos. También se expuso el modo de trabajo de la Mancomunitat Taula del Sènia que integra pueblos de Valencia, Catalunya y Aragón; y de los Grupos de Acción Local, como el del Alt Urgell-Cerdanya.