Albesa estrenará escuela a principios de 2024 tras casi 20 años de espera

Albesa estrenará a primeros del próximo año la nueva escuela L’Àlber tras casi 20 años de espera y reclamaciones tanto de la Associació de Famílies d’Alumnes (AFA) como de la comunidad educativa. Ese fue el compromiso del conseller de Educación, Josep González-Cambray, que ayer puso la primera piedra del nuevo equipamiento que se construirá en un solar de unos 5.000 metros cuadrados. Supondrá una inversión de 3,6 millones de euros para construir un edificio de una sola planta que contará con un aula de psicomotricidad, otra de música, comedor y cocina, nueve aulas, una pista polivalente y otros espacios lúdicos.

De esta forma, se pone fin a un largo recorrido de reclamaciones para denunciar el mal estado y la falta de seguridad de las actuales instalaciones, que tienen más de 70 años, según indicó la alcaldesa, Eugènia Puig-gròs. Los padres y madres de los 126 alumnos del centro han reclamado durante años a la conselleria un nuevo equipamiento con movilizaciones como medida depresión exigiendo que fuera digno y con todas las garantías. En 2019 también pidieron obras de urgencia en el actual edificio antes de iniciar el curso por el grave deterioro de las dependencias.

En 2021 se hizo un proceso participativo para definir cómo debía ser el nuevo centro con las aportaciones de toda la comunidad educativa y se consensuó el nuevo diseño del colegio. Familias, profesores y escolares del centro protagonizaron un emotivo acto en el que expresaron sus deseos para la nueva fase que comenzará el próximo curso. La alcaldesa aseguró que todas las calles que rodean el equipamiento también estarán debidamente urbanizadas.

Actuaciones en otros centros, climatización y nuevas energías

Además de la construcción de la escuela de Albesa, la conselleria tiene previstas otras actuaciones este año. Cabe destacar la del Instituto Lo Pla d’Urgell de Bellpuig, la escuela Pinyana de Lleida, el centro La Marinada o la ampliación de la escuela Arnau Berenguer de El Palau d’Anglesola. También se cuenta con un fondo de 102 millones para mejorar la climatización de los centros educativos, una treintena en Lleida, así como estrategias para la instalación de energías alternativas.