La ACA advierte de recortes drásticos de agua a granjas del Solsonès si la sequía persiste

La Agència Catalana de l’Aigua (ACA) advirtió ayer que, de mantenerse el actual escenario de sequía, habrá que aplicar recortes drásticos en las granjas de los seis municipios del Solsonès afectados por el estado de excepcionalidad de las cuencas internas y sometidos a las medidas del decreto aprobado por la Generalitat el pasado mes. Estos seis municipios son Solsona, Clariana de Cardener, Pinós, Riner, Olius y Navès. Los cinco primeros están dentro de la Mancomunitat d’Aigües del Solsonès y el último en la del Berguedà.

Todos están integrados en el sistema Ter-Llobregat, en las cuencas internas, con graves problemas de escasez. Según el presidente de la Mancomunitat, Daniel Rovira, el director de la ACA, Samuel Reyes, le comunicó que estos recortes podrán comportar una reducción del 30% en el consumo de agua en las granjas en un primer escenario “no muy lejano”, y que podría llegar al 50% si la situación se recrudece. “Esto comportaría, lógicamente, una limitación en las cabezas de ganado en cada explotación”.

Rovira puntualizó que será precisa una colaboración con la conselleria de Acción Climática para determinar cómo y cuándo se tendrá que actuar y qué medidas compensatorias se aplicarán, por lo que habrá que abordar reuniones en cuanto finalicen las vacaciones de Semana Santa. El decreto de sequía del Govern, ya en vigor, establece una dotación de 230 litros por habitante y día pero es poco concreto en el suministro a los animales de las granjas y a la actividad ganadera, prioritaria en una comarca como el Solsonès donde no hay regadío y la actividad industrial se limita a la capital, Solsona, y otros núcleos de población. En Olius hay unos 1.000 habitantes y la cabaña de ganado es de unos 60.000 cerdos.

En Pinós, menos de 300 vecinos pero hay granjas de pollos de grandes dimensiones y el número de cerdos ronda los 50.000. Esta circuntancia ha hecho que muchos alcaldes arremetan contra un decreto “que se merece un cero en previsión”. Establece que no se puede gastar agua para limpieza y manteniento de las instalaciones “lo que se contradice con la ley de Bienestar Animal que estipula que los animales deben estar siempre en buenas condiciones”.Además, es difuso y “no define cuánta agua debe consumir un pollo, una vaca o un cerdo, cuestiones que se tendrían que matizar y detallar”, coincideron.Rovira indicó que, por el momento y según los cálculos de los técnicos del ACA, el abastecimiento al ganado de las granjas del Solsonès está garantizado, aunque esta es una situación que puede cambiar en cuestión de días si no se registran precipitaciones de importancia.

El presidente de la Mancomunidad recordó que el organismo ya tiene una conducción que la enlaza con la zona de la comarca que depende de la gestión de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), con la que se podría llegar a un acuerdo.

Los raiers no logran escapar de la escasez de agua

Los raiers de Coll de Nargó preparaban ayer las balsas para celebrar este sábado su primer descenso por el Segre en primavera. Los organizadores decidieron el año pasado dejar de hacerlo en agosto, tras años en que la falta de caudal había obligado a recortar el trayecto.

Confiaban en disponer de más agua para navegar en abril, en pleno deshielo. Sin embargo, la grave sequía que mantiene el río en situación de emergencia desde hace casi un año también les obligará esta vez a acortar el descenso. Será de menos de un kilómetro, cuando esperaban recorrer entre tres y cuatro kilómetros.

Ayer el Segre llevaba 11 metros cúbicos por segundo a su paso por La Seu (ver claves).El presidente de la Associació de Raiers de la Ribera del Segre, Àlex Ferrer, explicó que volverán a hacer un recorrido “corto, igual que en las últimas ediciones”, condicionados por la sequía. Ferrer recordó las bajadas en las que habían llegado a recorrer “entre 3 y 4 kilómetros”, no se hacen “como mínimo desde hace 8 años”, aseguró. Esta bajada será la primera desde que los Raiers fueron declarados Patrimonio Inmaterial de la Unesco en 2022.

La asociación trabaja para tener listas las dos balsas, que tienen diez troncos en cada tramo. La plaza del ayuntamiento está llena desde el lunes de troncos que, con oficio y destreza, los raiers de la asociación irán montando y atando hasta el viernes.

El Govern permite llenar en verano las piscinas municipales

El Govern ha hecho efectivas las medidas contra la sequía previstas en las cuencas internas pese a las discrepancias de la oposición.

Lleida pertenece, salvo los 6 municipios del Solsonès, a la cuenca del Ebro. Aunque no se llegó a un consenso por la negativa del PSC a una moratoria del régimen sancionador y de Junts a dar respaldo a un pacto con los socialistas, el Govern aplicará medidas planteadas como que las piscines comunitarias, municipales o “similares” se puedan llenar este verano (el decreto de sequía lo prohibía) y 50 millones más para los ayuntamientos para obras que mejoren los abastecimientos.