MUNICIPIOS PROYECTOS
Ensayos antes de retirar lodo del Segre en Mequinensa
A cargo de la empresa pública Tragsa entre este año y el próximo
La empresa pública Tragsa llevará a cabo tres ensayos que servirán para determinar el mejor sistema para retirar los lodos acumulados en el tramo final del río Segre en Mequinensa. Así lo aseguró el alcalde, Antonio Sanjuán, en el pleno que se celebró la semana pasada. Estas pruebas se llevarán a cabo entre este año y el que viene.
El traslado de los lodos procedenntes del desembalse de Barasona permitirá recuperar el cauce del río y es una actuación que el ayuntamiento reclama desde hace tres décadas. Los ensayos se llevarán a cabo en la zona del Espigón y frente a las Piscinas Municipales. Está previsto que se desplacen cerca de 19.000 metros cúbicos de lodos, de los cerca de medio millón que se estiman depositados en una superficie de 70 hectáreas y que causan problemas en la navegabilidad del río, en las captaciones de agua de uso agrícola e industrial y en la práctica de deportes como la pesca, el remo, el piragüismo o el triatlón.
Por otra parte, en el pleno de Mequinensa aprobó la semana pasada su presupuesto municipal de 2023, que asciende a 7,7 millones de euros. Buena parte de las inversiones previstas se destinarán a finalizar la construcción de la residencia para la tercera edad y equipar el edificio.
Plan para que sedimentos del Segre lleguen al delta del Ebro
Al proyecto para retirar lodos del Segre en Mequinensa, se suma otro para que sedimentos de este río y el Cinca lleguen al delta del Ebro y contribuyan a preservarlo.
Lo impulsa el ministerio para la Transición Ecológica y ha iniciado su tramitación ambiental. Plantea la posibilidad de vaciar el pantano de Riba-roja para extraer sedimentos acumulados. El Ejecutivo español retoma así una propuesta que la Generalitat formuló en 2014.
Sin embargo, advierte del riesgo de “impactos socioeconómicos y medioambientales de gran magnitud”. “Dependiendo de la duración del vaciado, pueden producirse graves efectos en el espacio natural del Aiguabarreig Cinca-Segre”, señala. También apunta a un “riesgo elevado de acumulación excesiva de sedimentos” aguas abajo que pueda afectar a abastecimientos de boca, regadíos y espacios naturales.