ENERGÍA RENOVABLES
Visto bueno de Urbanismo a dos plantas para obtener abono y gas de residuos orgánicos
Proyectos en Alcarràs y Térmens han recibido la aprobación inicial de la comisión de Lleida || La Generalitat autoriza la tubería para verter biometano producido en Vila- sana en la red de distribución
Dos proyectos para producir fertilizantes y biogás a partir de residuos orgánicos han recibido la aprobación inicial de la comisión de Urbanismo de Lleida. Se trata de plantas previstas en Alcarràs y Térmens, las primeras de este tipo que han obtenido este visto bueno. Al menos una decena en Lleida están en proceso de autorización ante la Generalitat, en un momento en el que crece el interés por los proyectos de economía circular.
Los dos proyectos deberán incorporar cambios prescritos por Urbanismo y someterse a información pública antes de obtener la aprobación definitiva. La empresa Agrolérida, propiedad de los accionistas de Vall Companys, impulsa la planta de Alcarràs. Tendrá capacidad para tratar cada año 100.000 metros cúbicos de purines, 10.000 toneladas de estiércol y otras tantas de residuos animales.
El gas metano que libera este material orgánico al descomponerse se depurará para producir biometano e inyectarlo en la red de gas. Podrá generar cada año 2,3 millones de metros cúbicos de biogás depurado, el equivalente al consumo de 4.669 viviendas. También obtendrá compost y fertilizante mineral en forma de sulfato de amonio, nitrato de amonio o lactato amónico.En cuanto al complejo de Térmens, su promotor proyecta una planta con capacidad para 30.000 toneladas de deyecciones al año de granjas de la Noguera y el Pla d’Urgell, a las que aplicará dos tipos de tratamiento.
Separará la fracción líquida de la sólida y compostará esta última para venderla como fertilizante a países de la UE. En una segunda etapa, está previsto dotarla de una planta de biogás. En este caso, está previsto aprovechar el metano que emana de los purines como combustible para generar electricidad. Por otra parte, la Generalitat ha autorizado la tubería que permitirá a la empresa Porgaporcs verter en la red de distribución de gas biometano producido en sus instalaciones de Vila-sana.
Economía circular para adaptarse al cambio climático
Desarrollar la economía circular puede ser una estrategia eficaz de adaptación al cambio climático. Esta es una de las ideas que apuntaron ayer diferentes participantes en la quinta cumbre de embajadores europeos del pacto climático en España, que se celebró en el edificio del rectorado de la Universitat de Lleida (UdL).
Reutilizar materiales y convertir en materias primas lo que hasta ahora se desechaba al considerarlo un residuo se presentó como una opción para paliar los perjuicios que ocasionará un clima cada vez más extremo, capaz de reducir sensiblemente la productividad agrícola en el futuro.Durante el acto inaugural, el secretario de Alimentación de la Generalitat, Carmel Módol, afirmó que “la economía circular es lo que hacían nuestros abuelos, reutilizar”. El presidente de la Diputación, Joan Talarn, recalcó que “en Lleida somos capaces de convivir con una naturaleza cambiante”, mientras que el alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, recordó la “vocación agroalimentaria” del territorio. En la jornada se incidió también en reducir el desperdicio de alimentos, que cifraron en un 40% de los que se producen.