El canal de Urgell ya baja sin volumen y se preparan las vallas para reservar el agua para los municipios
Después de cerrar compuertas del canal principal sólo circula un palmo de agua para garantizar abastecimientos
La bajada del volumen del canal de Urgell se ha empezado a notar después del cierre de compuertas de la acequia principal, que tiene su inicio en Ponts el martes al mediodía. Con el paso de las horas se ha hecho evidente que el canal está cerrado y ahora sólo circula un palmo de agua que tiene que servir para garantizar abastecimientos a municipios. Mientras tanto, operarios de la Casa Canal han empezado a instalar vallas con el fin de delimitar zonas de almacenaje de agua a lo largo de la infraestructura y dar así respuesta al elevado consumo de agua que hay durante los meses de verano en las poblaciones. Con el cierre anticipado del canal por la falta de reservas a Oliana y Rialb, 50.000 hectáreas de cultivos se quedarán sin poder regar los próximos meses.
El jefe de obra del canal de Urgell, Joan Martí, ha explicado que una vez que han podido acceder al interior del canal tras la reducción de caudal, los operarios han empezado a hacer "paradas o presas" para meter agua para realizar depósitos y garantizar el abastecimiento municipal, granjas e industrias. Se están haciendo manuales, con tablones de madera pero otros ya las tienen automatizadas porque forman parte del sistema de gestión que se aplica en el canal durante el invierno, cuando se cierra. La diferencia de este cierre anticipado es que en invierno el agua deja de circular por completo durante tres semanas al mes pero ahora siempre bajarán dos metros cúbicos.
Desde la Casa Canal no saben cuándo se podrán retirar esas presas que se han empezado a instalar ya que todo va en función de cuándo se alargará la actual sequía. Todo apunta a que estas actuaciones se mantendrán durante todo el verano ya que aunque llueva en las próximas semanas, difícilmente se podrá reanudar la campaña de regadío. La reserva de agua que se conseguirá ahora con estas vallas también debe servir para regar puntualmente las fincas de árboles frutales y asegurar su supervivencia. Ningún otro cultivo se podrá regar y por tanto habrá pérdidas millonarias en la zona afectada.