Dos muertos al chocar un coche con otro que iba contradirección en la A-2

Dos personas fallecieron la madrugada de ayer en una colisión frontal provocada por un coche que circulaba en sentido contrario en la A-2 a su paso por el término municipal de Granyanella, entre Tàrrega y Cervera. En lo que va de año, once personas han perdido la vida en accidentes en las carreteras leridanas, el peor registro desde el año 2019.

Dos personas fallecieron la madrugada de ayer en una colisión frontal provocado por un coche que circulaba en sentido contrario en la A-2 a su paso por Granyanella, en la Segarra, entre Tàrrega y Cervera.

El accidente tuvo lugar a las 03.27 horas en el punto kilométrico 516 de esta vía cuando, por causas que se desconocen y que los Mossos d’Esquadra investigan, un conductor de 50 años y vecino de Lleida que circulaba incorrectamente en dirección Barcelona por los carriles en sentido Lleida chocó frontalmente con otro turismo. Como consecuencia del brutal impacto fallecieron este conductor y un joven de 19 años de Igualada, el acompañante del coche que circulaba correctamente. El chófer de este segundo vehículo, un joven de 22 años, resultó gravemente herido y fue evacuado por el SEM al Hospital Arnau de Vilanova de Lleida.

Hasta el lugar se desplazaron cinco patrullas de los Mossos d’Esquadra, dos dotaciones de los Bomberos de la Generalitat y tres ambulancias del SEM. El siniestro obligó a cortar este tramo de la autovía en sentido Lleida durante cerca de dos horas, hasta las 05.00 horas, cuando solo se restableció la circulación en un carril. El último accidente mortal en este mismo tramo de la A-2 se produjo en agosto de 2021, cuando un camionero murió calcinado a la altura del kilómetro 518.

Dos camiones chocaron y como consecuencia del fuerte impacto, uno de los dos vehículos se incendió. De hecho, según el último informe EuroRAP publicado por RAC, los 21 kilómetros de autovía que separan Bellpuig y Cervera son un punto negro que concentra un gran número de siniestros, sobre todo de camiones. Con la víctima de ayer, ya son once las personas que han fallecido de accidente de tráfico en lo que llevamos de año en las comarcas de Lleida frente a las cinco que hubo en el mismo período del año pasado.

Es el peor registro desde el año 2019, cuando también se contabilizaron 11 víctimas. El último accidente mortal se produjo el 7 de abril, cuando perdió la vida un de 22 años de Massoteres en un accidente en la carretera L-310 a la altura de La Figuerosa, núcleo de Tàrrega. Asimismo, cabe recordar el accidente que se produjo el pasado 10 de marzo en la C-53, que enlaza Tàrrega con Balaguer, a su paso por La Fuliola, donde fallecieron los tres ocupantes de un todoterreno: un vecino de Castellserà de 28 años y dos vecinos de Legazpi (Guipuzkoa) de 42 y 45 años.

En aquel caso, se produjo una colisión por embestida entre el todoterreno y un camión en la intersección con la vía que va de Castellserà a Ivars d’Urgell. A nivel de Catalunya, este año han perdido la vida 51 personas en la red viaria interurbana, según Trànsit.

Fin de semana trágico con cinco muertos en las carreteras

Cinco personas han perdido la vida en accidentes de tráfico ocurridos en las carreteras catalanas durante el fin de semana del Puente de Mayo. Una motorista menor de edad murió la madrugada del viernes al sábado en un accidente en la AP-7 a la altura de Santa Perpètua de Mogoda. La noche del viernes también perdió la vida un motorista de 39 años tras colisionar con su turismo en el distrito barcelonés de Horta-Guinardó. Además de las dos víctimas de Granyanella, un ciclista falleció el sábado por la tarde en la C-242 en Cornudella de Montsant al ser atropellado por un turismo cuyo conductor se dio a la fuga tras el siniestro.