El riego de supervivencia de los árboles frutales no está garantizado durante todos los meses de verano

Con el cierre del canal principal, la semana pasada, la Comunidad General de Regantes de los Canals d'Urgell calcula que las reservas actuales en los embalses de Oliana y Rialb sólo permitirían hacer un riego de supervivencia para los árboles frutales durante el verano. El pleno de la junta de gobierno acordó el martes que la distribución de agua para abastecimientos en municipios se hará de manera continua con un mínimo operativo de entre 1,5 y 2 metros cúbicos por segundo, que se repartirá por diferentes tramos del canal. El pleno de la junta de gobierno sirvió para acordar una serie de restricciones con el objetivo de preservar el suministro de agua para los abastecimientos. La declaración de estado de excepcionalidad por sequía extraordinaria por parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) a raíz de la situación bajo mínimos de la cuenca del Segre y la falta de reservas de agua en los embalses ha obligado a la comunidad a tomar esta medida extraordinaria. Dado que los volúmenes disponibles hoy por hoy son muy limitados, el riego de supervivencia de los árboles frutales no está garantizado durante todos los meses de verano. De hecho, hoy por hoy sólo se podría hacer un riego durante toda la campaña y por eso están pendientes de nuevas aportaciones a los pantanos.

Ante la situación actual, el inicio del riego de supervivencia se decidirá de forma acordada previamente por la junta de gobierno y todavía no está claro cuando se pueda hacer. Por otra parte, el agua que provenga de desagües generales se destinará al riego de árboles frutales, y desde la Casa Canal se recomienda a las colectividades que el agua de sus pozos y también la almacenada en sus embalses, se destine para regar los árboles. Finalmente, en un comunicado emitido por la comunidad de regantes, se informa de que están gestionando con las administraciones la disposición de ayudas e indemnizaciones por paliar las pérdidas a los cultivos.

Alerta del sector

Representantes de los sindicatos agrarios Unió de Pagesos, JARC y ASAJA, así como también Afrucat y la Federación de Cooperativas Catalanas (FCAC) se han reunido con el subdelegado del gobierno español en Lleida, José Crespín, para abordar la situación de sequía del sector agrario y ganadero, que en los últimos días también se ha visto agravado por el cierre del canal Segarra-Garrigues. El sector ha trasladado a la administración la preocupación que viven ante una situación completamente "excepcional" por falta de agua y las pérdidas que prevén en las cosechas. También han alertado de que ante este panorama, temen un abandono de explotaciones porque muchos no podrán continuar.

Crespín ha dicho que la reunión ha servido para captar el "día a día" de la situación de emergencia hídrica, conocer las afectaciones y el escenario actual. Un escenario que Crespín ha definido como "muy cambiante pero que tiene que permitir definir una hoja de ruta" a fin de que el Ministerio de Agricultura pueda cuantificar la magnitud de las consecuencias de la sequía. El subdelegado ha reiterado el compromiso del ejecutivo español de seguir acompañando y dando apoyo" al sector. Previamente, el subdelegado se ha reunido con el presidente de la Comunidad General de Regantes del Canal de Pinyana, Ramon Piqué, siguiendo con la ronda de contactos con las comunidades de regantes de Lleida para captar las inquietudes y la situación de cada infraestructura hidráulica ante la sequía y poder hacer un seguimiento de su evolución.