A vista de pueblo
Sanidad contra la despoblación
La Ribera del Sió se moviliza contra la falta de médicos que afecta a zonas rurales de toda Lleida
Los cinco municipios que engloba el CAP de Agramunt, en la Ribera del Sió, tienen 3 médicos para una población de 7.000 habitantes en 17 pueblos. Esta situación bajo mínimos ha provocado el cierre de la mayoría de los consultorios de los pequeños pueblos. Ahora, los que los mantienen abiertos solo tienen servicio de enfermera uno o dos días a la semana. En el consultorio de Les Pallargues, en el municipio de Els Plans de Sió, hace un año tenían servicio de médico dos días a la semana. Ahora una enfermera acude dos días a la semana para atender a los vecinos de Montroig, Bellver y Ossó, donde han cerrado los consultorios, y a los de Sisteró y Pelagalls. En Les Pallargues, Mercè Alsina presta el servicio de farmaciola a los vecinos de toda la zona. Como gran parte de lapoblación son gente mayor con problemas de movilidad, ella misma se desplaza para llevar los medicamentos a los pueblos. “Sin médicos, los mayores tendrán que trasladar su residencia y también tendremos que cerrar el servicio de farmacia”, dijo. Indicó que esta situación perjudica al pueblo, ya que con la pandemia vinieron a vivir 5 nuevas familias “que sin servicios acabarán por marcharse”.
El alcalde, Xavier Pintó, afirma que, tras una recogida de firmas para exigir médicos hace dos meses, “todo sigue igual”. “Si no se invierte en la mejora de los servicios, los pueblos acabarán por desaparecer”, concluye. La falta de médicos en las zonas rurales afecta especialmente a Lleida al tener muchos núcleos diseminados. En Tarroja, los vecinos se movilizaron hace dos años al quedarse sin médico. Ahora su consultorio da cobertura a 400 personas de otras 6 poblaciones de Plans de Sió y Torrefeta y Florejacs. Un 20% de los 2.040 médicos en activo de Lleida, unos 400, tienen más de 60 años y se jubilarán en los próximos cinco años, según el Colegio de Médicos, que apunta que la especialidad más afectada será la de Medicina Familiar y Comunitaria. Valora que será difícil cubrir las vacantes, porque no se han ofertado a tiempo más plazas en las facultades de Medicina ni de Médicos Internos Residentes (MIR). La situación se ve agravada por la marcha de médicos a países como Francia en busca de mejores condiciones laborales y salariales. La Generalitat ha elaborado un plan que incluye incentivos para el personal sanitario en zonas rurales y que especialistas de los grandes hospitales se desplacen a centros locales y comarcales.
Médicos itinerantes e incentivos en zonas rurales
Médicos de los grandes hospitales catalanes deberán desplazarse algunos días para dar apoyo a pequeños centros sanitarios y paliar así la falta de personal en especialidades como traumatología, psiquiatría o pediatría. Salud busca así atraer y conservar personal sanitario y asegurar el servicio en plazas “de difícil cobertura”, en su mayoría en zonas rurales. Esta propuesta se suma a otras como habilitar viviendas asequibles para médicos en zonas rurales y en enclaves turísticos. En estos últimos resulta difícil arrendar un piso por meses, ya que cada vez más inmuebles se alquilan por días a turistas. El departamento cree que proporcionar viviendas será un incentivo para atraer personal sanitario a plazas difíciles de cubrir, y plantea otros como facilitar transporte y otorgar complementos retributivos. Este plan deberá estar en marcha este año con una inversión inicial de 5 millones de euros. Asimismo, la Generalitat prevé aumentar las plazas de grado y FP para formar personal sanitario. Con carácter inmediato, aumentará en 145 las plazas de medicina y en 640 las de enfermería. En Lleida, la Universitat de Lleida (UdL) ganará el próximo curso un 10% más de plazas de primero y ofertará 132.