'Es la muerte anunciada': Afrucat alerta de que ya hay frutales regados por el canal de Urgell que han perdido toda la cosecha
La patronal frutícola reitera que hacen falta entre 3 y 4 riegos para asegurar la supervivencia de los árboles
La Associació Empresarial de Fruita de Catalunya, Afrucat, alerta de que ya hay fincas de árboles frutales regados por el canal de Urgell que dan por perdida la totalidad de su cosecha. Es el caso, por ejemplo, de un campo de nectarinos en el término de Castelldans donde los árboles muestran síntomas evidentes de estrés hídrico, como frutos arrugados y pérdida de hojas. "Lo que vemos en este campo es el inicio de una muerte anunciada", ha valorado Manel Simon, director general de Afrucat, que ha reiterado que, más allá de la producción que se perderá este año, la prioridad de la patronal frutícola es asegurar la supervivencia de los árboles. Por eso se necesitaría hacer entre 3 y 4 riegos, mientras que, de momento, sólo se ha asegurado uno.
En esta época del año los frutales deberían estar llenos de hojas y con los frutos en pleno crecimiento con la piel firme y tersa. Es todo lo contrario de la situación que comienzan a presentar varias fincas que riegan del canal de Urgell y desde Afrucat afirman que es cuestión de tiempo que el resto de explotaciones de la zona presenten los mismos síntomas.
En el caso de la finca de Castelldans, los frutos ya han empezado a secarse y a caer de los árboles. Esto, pese a que el agricultor de este campo de 10 hectáreas dispone de una balsa con la que riega los frutales, aunque no es suficiente, ya que los árboles reciben menos de una décima parte de lo que deberían. "Esta plantación tendrá una producción cero", aseguró Simon.
La principal duda de ahora, según el director general de Afrucat, es saber si los árboles podrán sobrevivir o no en verano. Por el momento, los regantes del canal de Urgell aseguran un solo riego que está previsto que se lleve a cabo a principios de junio y también se está hablando de otro riego en julio que dependerá, sin embargo, del nivel de reservas de agua de los pantanos. Desde la patronal frutícola alertan de que se necesitan al menos 3 o 4 riegos para salvar los árboles, y reiteran la necesidad de asegurar esta supervivencia y también de compensar a los agricultores con ayudas para evitar el abandono de las explotaciones.
El canal de Urgell riega unas 9.000 hectáreas de frutales. Afrucat cifra en 170 millones de euros las pérdidas en cuanto a costes que el sector tendrá este año en caso de perder toda la producción. En caso de que los árboles no sobrevivan, la cifra asciende hasta los 770 millones de euros. Por todo ello, la patronal frutícola pide que se reduzca un 20% el agua destinada al agua de boca y a mantener el caudal ecológico para asegurar la supervivencia de los árboles.