La riqueza le pudo al sentimiento

Muchos de los vecinos de Torà y Biosca se sienten de la Segarra, pero están de acuerdo con pasar al Solsonès tras las elecciones. Esperan que el cambio les suponga más fondos públicos y mejores servicios.

T orà y Biosca suman casi una cuarta parte de la superficie de la Segarra, y en estos dos municipios se han hallado los dos vestigios más antiguos del nombre de la comarca. Uno de ellos es un dracma griego del siglo III antes de Cristo con la palabra Segarra encontrado en Biosca. El otro es una lápida del siglo VI a. C. con la leyenda Municipium Sigarrensis cerca de Torà. La gran mayoría de los vecinos de estas dos localidades se sienten de la Segarra y, sin embargo, ven con buenos ojos pasar a formar parte del Solsonès tras las elecciones municipales del 28 de mayo.

Las razones que lo explican son claras y muy pragmáticas

En primer lugar, los vecinos valoran que el Solsonès es una comarca que recibe más ayudas públicas y presta mejores servicios que la Segarra. Ejemplo de ello es la red de caminos rurales, la red de transportes y los servicios sanitarios. También la red de agua potable del Solsonès, de la que Biosca se abastece desde hace una década, e incluso las líneas eléctricas. En Torà todavía hay núcleos sin luz como Cellers. El segundo motivo es una crítica generalizada en la Segarra. Consideran que Cervera siempre ha vivido de espaldas al resto de la comarca, mientras que Solsona ejerce como capital y referencia para el Solsonès, una comarca con cerca de 900 masías.

“Cervera ha tenido siempre la comarca abandonada mientras Solsona cuida la suya”, afirma Josep Freixas, alcalde de Biosca en los años noventa. “Yo me siento de la Segarra pero los servicios son mejores en el Solsonès. Por ejemplo, para ir al hospital de Lleida no hay transporte público y es un calvario desplazarse hasta allí, mientras que tenemos Igualada cerca de casa”, concluye.

En la misma línea se expresa Antoni Ferrer, propietario de un taller en Torà: “ Cervera siempre ha sido muy centralista y ha pasado olípicamente de la comarca. Quizás por ello mejoraremos al pasar al Solsonès”. También Judit Barniol, panadera de Biosca, cree que el Solsonès “funciona mejor que la Segarra”. Sin embargo, lamenta que el cambio de comarca que aprobó el Parlament a instancias de los ayuntamientos de Torà y Biosca no se haya consultado a los vecinos.

El acuerdo de la Cámara catalana establece que los dos municipios pasen al Solsonès tras las elecciones, pero aún persisten dudas sobre cómo hacerlo. La junta electoral ha dictaminado esta misma semana que los consistorios elegidos tras los comicios deberán volver a votar en sus plenos el cambio de comarca (ver desglose). También deberá decidirse cómo hacer la transición en servicios del día a día como la recogida de basura, por ejemplo.

La marcha de Torà y Biosca deja el temor en la Segarra a que otros municipios les sigan. Por ejemplo, que Sant Guim de Freixenet pueda pasar a la Anoia y Sanaüja a la Noguera.

Deberán votar una vez más el cambio de comarca

Cuando el Parlament aprobó el paso de Torà y Biosca de la Segarra al Solsonès el pasado 7 de marzo, los plenos de estos dos ayuntamientos ya habían manifestado en tres ocasiones su deseo de cambiar de comarca. Lo hicieron por primera vez en una votación en el año 2010, y los consistorios siguientes ratificaron esta voluntad en 2015 y 2018.

Tras el acuerdo del Parlament, los plenos de Torà y Biosca votaron una cuarta vez su voluntad de pasar de la Segarra al Solsonès. Sin embargo, tampoco esta fue la última. Esta misma semana, la Generalitat ha comunicado a los dos ayuntamientos y a los consells de la Segarra y el Solsonès una resolución de la junta electoral provincial según la cual los consistorios elegidos tras las elecciones del 28 de mayo deberán ratificar una vez más su intención de hacer efectivo el cambio de comarca.

La carta del Govern advierte a los dos consistorios que deberían celebrar esta votación sin demora, y les insta a hacerlo antes de que la junta electoral ponga en marcha el proceso para constituir los nuevos consells. De este modo, espera garantizar que los votos y los escaños de Torà y Biosca cuenten para formar parte del nuevo ente comarcal del Solsonès.