El Segarra-Garrigues exige repartir por igual las reservas de Rialb con el Canal d'Urgell

La asamblea de regantes del Segarra-Garrigues aprobó ayer su propuesta para repartir las reservas de Rialb con el Canal d’Urgell. Prevé una distribución por igual atendiendo a las hectáreas de frutales afectadas por la sequía, que en el Segarra-Garrigues son 4.000 y en el Canal d’Urgell 9.000. Según los cálculos de la comunidad, en la actualidad el sistema Oliana-Rialb tiene tras las últimas lluvias más de 18 hectómetros cúbicos para el regadío por lo que al Segarra-Garrigues le corresponderían más de 5 y al Canal d’Urgell cerca de 13, según explicó el presidente, Josep Maria Jové.

De esta forma, se podría garantizar la supervivencia de los árboles en ambos sistemas, según dijeron. Otra de las peticiones del Segarra-Garrigues es que el Canal d’Urgell priorice el riego en las zonas donde hay instalados sistemas de presurización (goteo o aspersión) antes que el riego a manta. El Segarra-Garrigues aduce que es un riego altamente eficiente que puede aprovechar mejor el agua que se les conceda, aunque debe ser un mínimo justo para no perder la campaña, algo que es del todo viable, indicó Jové.

Esta distribución ya se propuso en una reunión mantenida con Agricultura y el Canal d’Urgell que este último declinó y se volverá a plantear la semana que viene. Si no hay acuerdo, se esperará a la decisión de la junta de desembalse de la Confederación Hidrográfica del Ebro prevista para finales de mes. Jové destacó que “si no podemos contar con esta dotación no podremos salvar nuestros árboles”.

Recordó que tras el cierre del canal el pasado día 2 la comunidad se puso en contacto con el IRTA para analizar el caudal preciso para salvar los árboles “y los expertos coinciden en la distribución que proponemos”, indicó Jové. Reconoció que en estos momentos “los agricultores son muy reacios a tirar la fruta de los árboles y toman las medidas que pueden esperando salvar los cultivos”. Remarcó que el IRTA ha puesto en marcha un estudio en una finca de Castelldans en la que se aplican varios tipos de poda eficientes contra la sequía, aunque admitió que no se podrá aplicar este año pero sí en situaciones parecidas en un futuro.Mientras, la plataforma Manifest Gran Urgell acordó el viernes llevar a cabo una protesta en Barcelona.

Los coches saldrán el miércoles 24 a las 6 de la mañana de Mollerussa para exigir ayudas al campo, concienciar a la sociedad de las repercusiones de la sequía y reunirse con varias autoridades.

Las reservas del Segre suben pero no son suficientes

Las reservas de los embalses del Segre, Oliana y Rialb, siguen aumentando en los últimos días gracias a las lluvias y precipitaciones de nieve en el Pirineo, aunque no son suficientes para compensar los graves daños por la sequía y revertir la situación de excepcionalidad en la cuenca. Ayer almacenaban 69,9 hectómetros cúbicos (41,1 Oliana y 28,8 Rialb), el viernes 69,3, el jueves 68,9 y el miércoles 68,4 con tendencia aumentar ya que la previsión es que los chubascos continúen en las comarcas de montaña, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).

El caudal del río ayer era de 4,5 metros cúbicos por segundo en La Seu, 6,3 metros cúbicos por segundo en Oliana, 18 en el Balaguer y 14,6 en Lleida ciudad. En este último tramo, hubo una nueva crecida provocada para mantener el caudal ecológico y la supervivencia de especies. Algunas comunidades de regantes han solicitado que se reduzca este caudal ecológico para dar agua a los cultivos, una petición que declinan taxativamente las entidades ecologistas por los graves perjuicios que puede causar en los hábitats fluviales.

Por lo que respecta a la cuenca del Ribagorçana, que abastece a los riegos de Pinyana, l’Horta de Lleida, el Algerri-Balaguer y el Aragón y Catalunya y que está en alerta, los embalses (Baserca, Cavallers, Escales, Canelles y Santa Ana), suman casi 335 hectómetros cúbicos cuando hace unas semanas superaban los 400. La del Pallaresa, también en alerta, almacena en sus pantanos (Talarn, Terradets y Camarasa) cerca de 260 hectómetros cúbicos.

Prosiguen las obras para poner en regadío otras 2.000 hectáreas

La asamblea informó de la evolución de las obras para poner en riego 2.000 nuevas hectáreas.Según Jové, “la sequía no las ha parado”. Se están llevando a cabo en los sectores 7 (Maldà), 8 (Arbeca), 9 (Les Borges) y 13 (Sarroca, Llardecans, Aitona y Seròs). También se está llevando a cabo la conexión de L’Albagés con el sector 12 (Torrebesses).

Jové dijo que “es una obra muy importante y necesaria ya que traer el agua al sector 12 cuesta mucho, tiene un coste energético muy elevado, y la tubería sufre numerosas averías”.En relación a las nuevas adhesiones de los agricultores al regadío, Jové reconoció que “la actual situación de sequía no nos hace ningún bien, ya hay gente que duda en adherirse porque ve que tampoco tendrá agua”. Frente a este inconveniente, pidió a la Administración habilitar el riego sin tener un mínimo de adhesiones ya que “la gente se apunta cuando ve que riega el vecino”.