ELECCIONES
Junts carga contra ERC por el pacto de la Diputación de Lleida con el PSC y PL
Bergós acusa a Esquerra de priorizar acuerdos 'antinaturales' para apartarles de las instituciones|| Talarn defiende que el de la Diputación es el mejor para el territorio
El presidente de Junts en Lleida, Eloi Bergós, cargó ayer contra ERC tras anunciar el martes un pacto para gobernar la Diputación de Lleida con el PSC y Pacte Local y acusó a los republicanos de tratar de apartar a los juntistas de las instituciones en las que estos han logrado mayorías significativas pero insuficientes para gobernar en solitario, como la propia corporación provincial. Dijo que son pactos “antinaturales” y tienen como objetivo aislar a Junts “y asegurarse representación de la mano de los del 155”. “El enemigo de ERC no es el españolismo ni el unionismo, sino Junts”, sentenció.
En los últimos 4 años han gobernado en coalición con la presidencia en manos de ERC. La brecha entre ERC y Junts se hizo más profunda si cabe tras el pacto del martes entre Esquerra y PSC, que incluye la Diputación de Tarragona, a pesar de que los líderes de ambas formaciones habían acordado una aproximación para formar gobiernos municipales tras el 28-M. Las hostilidades llegaron también ayer al Parlament (ver página 18).
En Girona sí revalidan el gobierno ERC-Junts. Pero en Lleida se acusan mútuamente del fracaso de las negociaciones y de evitar el acuerdo pese a varias ofertas. Ayer, el líder de Junts en Lleida habló de ruptura y acusó a ERC de tratar de “eliminar al partido ganador” de los comicios.
En el conjunto de la provincia, ERC logró 445 votos más que Junts pero en concejales quedaron igualados a 668. Sin embargo, los juntistas se hicieron con la mayoría en plazas como Les Borges Blanques, Tàrrega o la propia Diputación (con 10 de los 25 diputados frente a los 8 de ERC, que perdió 3). De hecho, el pacto de la Diputación se trasladará probablemente a la capital del Urgell, donde ERC podría rubricar en breve un acuerdo con PSC y la CUP.El malestar de Junts se repetía en Impulsem, su socio para el 28-M.
Su secretario general, Manel Solé, lamentó que “no se ha respetado lo que ha pedido el territorio” con sus votos. El votante, aseguró Solé, “ha pedido un cambio”, frente a la gestión actual de la Diputación y la llamada “gobernanza republicana”, que no se consumará. También hizo autocrítica y señaló que, si bien la coalición con Junts ha sido productiva hasta el 28 de mayo, a la hora de pactar gobiernos locales “nos ha faltado agilidad”, señaló.
El líder de Impulsem rechazó criticar la capacidad de negociación de Junts. Aun así, dentro de la formación sí hay malestar por el resultado del proceso. El presidente de la Diputación en funciones, el republicano Joan Talarn, aseguró que han intentado revalidar el pacto de gobierno con Junts pero “no ha sido posible” y dijo priorizar la gobernanza republicana.
“El nuestro es el mejor pacto para el territorio”, señaló.