El Pirineo supera las previsiones y llega al 100% de ocupación por Sant Joan

La ocupación turística durante este fin de semana de Sant Joan, centrado en las fiestas del fuego y las fallas en el Pirineo y que inicia la temporada estival en Lleida, ha superado las previsiones y llegado al 100%, lo que hace prever que se repetirá el récord del pasado verano, según explicó el responsable de Promoción del Patronato de Turismo de la Diputación, Juli Alegre. En un principio se estimó un procentaje del 85% con picos de plena ocupación, ya que desde mediados de mayo se regitran tormentas y precipitaciones en las comarcas de montaña.

Finalmente, el buen tiempo cambió esta previsión, remarcó Alegre. Por lo que respecta al turismo rural el fin de semana ha sido de plena ocupación tanto en el llano como en la montaña, al igual que en los bungalows, mientras que en las zonas de acampada fue del 100% en el Pirineo y del 60% en los establecimientos del llano. En cuanto a los hoteles ha oscilado entre el 90 y el 100%, según confirmó el presidente del sector, Josep Castellarnau.

La buena afluencia de público también se ha notado en los deportes de aventura. El rafting, en especial, pero también otras actividades, registraron un importante número de servicios por la buena climatológia y el estado del Noguera Pallaresa, con un caudal más que garantizado para facilitar la bajada de las barcas tras las últimas precipitaciones. Principalmente, los visitantes han sido turistas de Catalunya y otras comunidades del Estado próximas que han pernoctado durante dos noches, la de viernes y el sábado, indicó Alegre.El buen inicio de la temporada hace prever un verano con cifras similares o mejores que el de 2022 puesto que ya hay alojamientos con reservas que rozan el completo para el próximo mes de agosto, como es el caso de las casas de payés y los bungalows.

Los hoteles tienen, por ahora, una ocupación que oscila entre el 40 y el 50% a primeros de ese mes, aunque esperan aumentar este procentaje a medida que se acerquen las fechas más significativas como la Mare de Déu d’Agost. De esta forma, se espera consolidar los datos históricos del pasado año que se cerró con 581.616 visitantes y 1.562.637 pernoctaciones, según los últimos balances de la Diputación, superando incluso los datos de antes de la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus.También hubo una importante afluencia de visitantes en puntos del interior como la platgeta de Camarasa donde, como cada año, ya se han tomado medidas de seguridad para evitar masificaciones y accidentes por bañarse en zonas peligrosas.

Lleida ha recibido más de 414.000 visitantes este año

Lleida ha recibido entre enero y abril de este año 414.000 visitantes, un 5% más que en 2022 y un 12% más que en 2019. En cuanto a las pernoctaciones, se registraron más de un millón, por encima del año pasado y de 2019, según los datos del Patronato de Turismo de la Diputación.Cabe recordar que en 2022 Sant Joan cayó en puente y rozó el 100% de ocupación. Las casas de payés se acercaron al 90% y los hoteles y los bungalows colgaron el cartel de completo.Por lo que respecta a uno de los mayores atractivos de la montaña, los deportes de aventura, se prevé ofrecer unas 800.000 actividades esta campaña, todavía afectada por la sequía que mantiene al Pallaresa en estado de alerta. Esta cifra supondría un ligero aumento respecto al año pasado y se situaría un 4% por encima de 2019. En total, Lleida cuenta con 280 empresas de turismo activo, 9 más que en 2022, según indicaron responsables del sector.