ELECCIONES
Empieza la lucha por el voto
Sánchez carga contra los pactos PP-Vox y Feijóo critica los acuerdos del PSOE con independentistas || Sumar rechaza el referéndum y enfada a Esquerra
Los partidos dieron ayer el pistoletazo de salida a la campaña electoral, que finalizará el próximo día 21, con actos en distintas partes de la geografía española en los que los ataques a sus rivales políticos fueron la tónica general. El PSOE arrancó su carrera con un multitudinario mitin en la Casa de Campo de Madrid en el que el presidente del Gobierno y candidato, Pedro Sánchez, reivindicó su apuesta por la “convivencia de Catalunya” y cargó duramente contra el PP por sus pactos con Vox tras las elecciones municipales y autonómicas. Según él, los populares han más que demostrado estas últimas semanas que son capaces de “intercambiar derechos por votos” y que los socialistas deben hacer frente al “túnel del tiempo” y “los 20 años de retroceso en los derechos de los trabajadores, pensionistas y personas LGTBI” que representan el tándem Feijóo-Abascal.
Catalunya también estuvo muy presente en el acto de inicio de campaña del PP, donde Alberto Núñez Feijóo, que tras asistir a un acto en su pueblo natal, Os Peares (Ourense), celebró o en Castelldefels. Reivindicó que su objetivo es ser “el presidente de todos los españoles y también de todos los catalanes”. Feijóo, que cargó contra Sánchez por estar al frente de un “Gobierno aliado del independentismo”, aseveró que los comicios del próximo 23 de julio tienen que servir para “derrotar al sanchismo” que mintió “prometiendo traer de vuelta al expresident Carles Puigdemont mientras le ofrecía indultos” (más información página 21).
Desde A Coruña, la líder de Sumar, Yolanda Díaz, pidió un acuerdo para proteger la cultura de los ataques de la derecha y se dedicó a desgranar su programa electoral, en el que se incluye, entre otras muchas cosas, una subida del salario mínimo superior al IPC o la “herencia universal” de 20.000 euros. Los que se queda fuera del mismo es la propuesta para realización de un referéndum en Catalunya, algo que defienden los comuns. Díaz opta por cambiar este punto por negociar un “nuevo pacto político” en la mesa de diálogo que pase por las urnas.
Que el referéndum se haya quedado fuera de sus promesas electorales provocó el enfado de los partidos independentistas. En Barcelona, el cabeza de lista de ERC, Gabriel Rufián, advirtió de que “votar a Sumar es restar” y criticó que Días se presentara como la “la izquierda más moderna”, pero al mismo tiempo “no quiere oír hablar” del referendo. En esta línea, apuntó que “la clave” del 23-J es “dar fuerza” a ERC y Bildu para obligar al PSOE a pactar con las izquierdas.Junts también inició la carrera electoral en Barcelona, donde la candidata por Barcelona en el Congreso, Míriam Nogueras, avisó de que ellos serán los que pondrán “el precio más alto” a los votos de los catalanes tras las elecciones generales y diferenció la estrategia de su partido a la de ERC.
Vox se presentó como el antídoto al “sanchismo” en Ejido.