Balance positivo provisional de la campaña de prevención de incendios en la siega gracias a las últimas lluvias

Los Agentes Rurales han hecho un balance provisional positivo de la campaña de prevención de incendios durante la siega. El jefe del cuerpo en la región de Lleida, Llorens Ricou, ha dicho que la de este año es una situación "bastante diferente" porque las últimas lluvias han "reverdecido" los campos y la sequía ha provocado una bajada de la producción de cereal y por lo tanto hay poca paja.

Hasta ahora no ha habido que activar ningún plan Alfa 3 cuando en las mismas fechas el año pasado ya se habían producido 32 incendios y unas 200 hectáreas calcinadas. Los Agentes Rurales han efectuado más de 230 inspecciones a máquinas recolectoras y la mayoría de campesinos cumplen las medidas de seguridad para prevenir incendios. Un hecho que desde el cuerpo se ha destacado por la elevada concienciación del sector.

El jefe de los Agentes Rurales en Lleida ha explicado que gracias a las últimas lluvias los campos han "reverdecido" y eso ha contribuido a que el dispositivo de prevención de incendios durante la campaña de la siega esté siendo muy diferente de los últimos años. Además, la sequía ha provocado que haya poca paja porque la producción de cereal ha ido a la baja y por lo tanto, las máquinas recolectoras no tienen que trabajar tanto.

Los Agentes Rurales han doblado los medios para hacer frente a la situación. Una de las novedades de este año es que se ha puesto en marcha la sala de coordinación conjunta, situada en Torreferrussa, en Santa Perpètua de Mogoda, en el Vallès Occidental. También se ha incorporado al dispositivo un nuevo grupo de difusión de incidencias dirigido a las personas miembros de la Mesa del Cereal. Con respecto a herramientas, se han incluido algunas de nuevas como los sopladores, que permiten trabajar desde la primera intervención para retener el fuego.

Un hecho que demuestra que la campaña de este año es totalmente diferente a las anteriores es que sólo se han producido 13 incendios y se han quemado unas 42 hectáreas, cuando el año pasado, ya había habido 32 con unas 200 hectáreas calcinadas. Eso a 12 de julio, cuando la situación de la campaña está muy avanzada.

Hasta ahora no se ha activado ninguna vez el plan Alfa 3 y en una de las zonas donde se ha presentado el dispositivo este miércoles, en Montmaneu, en la Alta Segarra, sólo se encontraba en el plan Alfa 1. Sí que en el Segrià y las Garrigues se ha activado el plan Alfa 2. Ricou ha destacado que la tarea preventiva de los últimos años ha estado muy importante con la información que se ha facilitado al campesinado y la concienciación de los maquinistas, que son los primeros interesados en que no se les quemen las máquinas.

El dispositivo se hace en colaboración con la Dirección General de Agricultura, el Grupo Especial de Prevención de Incendios Forestales (GEPIF) y las agrupaciones de defensa forestal (ADF). Empieza el 1 de junio y se acaba el 31 de agosto, en el que son obligatorios los medios de extinción. Operativamente afecta a nueve comarcas que son el Segrià, la Noguera, el Pla d'Urgell, el Urgell, la Segarra, el Solsonès, el Bages, Anoia y la Conca de Barberà.