SEQUÍA CONSECUENCIAS
Alojamientos y restaurantes en el entorno de Canelles pierden clientes por el pantano vacío
El bajo nivel del embalse que impide navegar reduce también la afluencia de turistas en pueblos como Àger y Viacamp || Mientras el Pallaresa gana reservas por las lluvias y permite el rafting con normalidad
La sequía ha vaciado el pantano de Canelles de actividad náutica y esto, a su vez, ha restado clientes a alojamientos y restaurantes de la zona. La prolongada escasez de lluvias ha provocado que el embalse, en la cuenca del Noguera Ribagorçana, se encuentre al 14,75% de su capacidad con 100 hectómetros cúbicos, unos 170 menos que hace un año, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). El bajo nivel del pantano ha provocado que algunas empresas que ofrecían actividades de navegación por el embalse y el congosto de Mont-rebei hayan optado por cerrar (ver desglose).
Mientras, la alcaldesa de Àger, Mireia Burgués, explicó que una firma “ha diversificado su actividad” y mantiene la navegación en la zona de Finestres, donde sí que hay agua, y también ofrece actividades en los pantanos de Cellers y Sant Antoni, en el Noguera Pallaresa.En Àger, la falta de agua en Canelles “ha hecho mucho daño” a los negocios, aunque Burgués apuntó que también podrían influir otros factores como la situación económica. Afirmó que restaurantes y alojamientos se han visto afectados y apuntó que “ahora tendría que estar todo lleno y está vacío”. La edil aseguró que “si no llueve mucho es difícil que en 2024 se pueda operar”, anque espera “que el año que viene sea más lluvioso”.
El alcalde de Sant Esteve, Jordi Navarra, explicó que “en Mont-rebei hay menos gente, pero sigue habiendo mucha”. Apuntó que Canelles “es tan grande y está tan vacío que tiene que llover y nevar mucho” para llenarlo. El primer edil de Viacamp, Jorge Piqué, afirmó que serán necesarios entre dos y tres años con buenas pluviometrías y nevadas para que el nivel del agua sea óptimo.
Explicó que en su localidad, tanto el restaurante como el albergue tienen menos clientes. No obstante, aseguró que “el senderismo aguanta”.Mientras, las lluvias han hecho aumentar las reservas de agua en el Noguera Pallaresa y el rafting trabaja “con toda normalidad”. El presidente de la Associació d’Empreses d’Esports d’Aventura del Sobirà, Flòrido Dolcet, apuntó que las precipitaciones también han mejorado la situación en los barrancos y lagos.
“No sabemos cuándo podremos volver a navegar en el pantano”Algunas empresas que ofrecían actividades náuticas en Canelles han tenido que cerrar debido al bajo nivel del embalse. Enric Maestre, de Montsec Activa, explicó que “no sabemos cuándo podremos volver”, aunque señaló que quizás “cae una buena lluvia o nevada y se llena el pantano”. Esta empresa solo abrió en abril.
Desde otra firma que también ha parado su actividad explicaron que “Canelles está seco” y apostaron por trasladarse al embalse de Camarasa, aunque “nos han echado”. Afirmaron que la Generalitat solo les dio un permiso para navegar por un tramo “donde no hay agua”. En este sentido, la alcaldesa de Camarasa, Elisabet Lizaso, dijo que “no se ha echado a nadie” y destacó que el embalse acoge una reserva de fauna con especies como el águila perdicera.