CANDIDATOS AL SENADO
Sara Bailac, de ERC: «No tenemos más frecuencias de trenes en Lleida porque Renfe no quiere»
Nacida en Tàrrega hace 37 años, esta politóloga es senadora desde 2019. Estas serán sus terceras elecciones a la Cámara Alta, cuya función de representación territorial cuestiona, aunque “esta no es nuestra guerra”
El punto de partida de estas elecciones son los resultados de las municipales. A ERC en Lleida le fue bien, pero ha habido una demovilización del voto independentista. ¿Seguirá así? Confiamos en que el electorado se movilizará. Creemos que, aunque es un contexto que no acompanya, en Lleida muchos tienen ahora un pico de trabajo (en el campo) y tienen que quedarse aquí. La amenaza de un gobierno de derecha y ultraderecha puede movilizar al electorado que no fue a las municipales. Confiamos en eso.
Todos apelan al voto útil y eso puede polarizarlo. ¿En Catalunya también? Claramente hay un marco estatal que quiere imponer la imagen del bipartidismo. Lo vimos en el cara a cara. Pero la visión de Catalunya de estas elecciones es muy distinta porque las inversiones, gobierne quien gobierne en Madrid, no llegan ni a Lleida ni a Catalunya. En los últimos años se ha demostrado que, cuando ERC es fuerte en Madrid y puede condicionar, lo acaba haciendo y el Gobierno del PSOE vira hacia la izquierda y avanza en derechos, pero también hace pasos hacia la resolución del conflicto político entre Catalunya y el Estado. Debemos entender estas elecciones en este marco y salir del bipartidismo.
¿Esos pasos hacia la resolución del conflicto, están paralizados? Es evidente que no se ha conseguido todo lo que se quería, pero hemos logrado que el PSOE haga pasos que siempre había dicho que no haría. Por ejemplo, reconocer de cara al mundo que aquí hay un problema político entre Catalunya y el Estado; o bien sentarse a hablar en un espacio en el que planteamos la amnistía y la autodeterminación. También la derogación del delito de sedición o los indultos. Para mí es evidente que hemos forzado estos pasos, pero podría haber muchos más y por ello necesitamos toda la fuerza que nos puedan volver a dar.
En cambio, el independentismo sigue dividido y no parece que vaya a cambiar tras las elecciones. Cuanta más fuerza tenga el independentismo en Madrid y más podamos consensuar las estrategias, más podremos condicionar al gobierno del Estado para la resolución del conflicto. Tenemos la estrategia muy clara y definida desde hace tiempo: apostamos por que la resolución del conflicto pase por un referéndum acordado con el Estado y reconocido por la comunidad internacional. Si alguien tiene otra solución, que la ponga sobre la mesa, porque a mí me parece que nadie más la ha puesto.
Los resultados de ERC en Lleida en 2019 fueron buenos: dos de cuatro diputados y tres de cuatro senadores. ¿Como les irá el 23-J? Aspiramos a consolidar estos resultados y a crecer porque entendemos que viendo la experiencia de estos cuatro años quien mejor ha defendido los intereses de Lleida ha sido ERC. Hemos desencallado inversiones históricas como la del Eix Pirinenc, con 260 millones que ya no hay que esperar que impulse el Estado porque son una encomienda de gestión. Hemos logrado 250 millones para nuevos accesos a la AP-2 y la AP-7, que se traducirán en el acceso de Castelldans. Hemos conseguido 7 millones para el Parc Científic i Tecnològic de Gardeny, que ha de ser el motor de una capital de la agrobiotecnología como Lleida. Ahora hay que revertir la desinversión por ejemplo en trenes, que han llevado hasta a cerrar la estación de Bell-lloc. Se ha demostrado que con mayorías absolutas del PP y del PSOE estos recursos no han llegado.
¿Si pierde el PSOE las encomiendas de gestión seguirán? Estos acuerdos son ley, están en los presupuestos y hay que cumplirlos.
Usted ha sido muy beligerante con los trenes, pero la mejora de las frecuencias de la línea de Manresa no avanza. No lo entendemos. La sensación es que hacen presión para tener fuerza para negociar el contrato programa a nivel de toda Catalunya. No tenemos mejor servicio porque Renfe no quiere.
¿Qué destacaría de esta legislatura en el Senado? De lo que más orgullosa me siento es de haber podido formar parte de la negociación de los presupuestos (del Estado) y de haber logrado más recursos para las comarcas de Lleida, que no son solo más inversiones sino también un cambio de modelo con las encomiendas de gestión. Con esto tenemos la mejor de las garantías. Antes de ayer (lunes 10) salieron los datos de ejecución de los presupeustos en Catalunya de la Generalitat y la cifra en Lleida es del 90,7% del presupuesto de 2022. ¿Qué mejor garantía que que sea la Generalitat la que ejecute las inversiones estatales pendientes?
¿Qué más ha aprendido? Uno de los grandes aprendizajes de esta legislatura ha sido el frente común institucional y social de Lleida en Madrid para pedir que se recuperen las frecuencias de los AVE en Lleida. Es una forma de funcionar que hay que marcar como positiva. Dimos una imagen de fuerza. Estamos peor que antes de la pandemia. No se han recuperado las frecuencias anteriores y necesitaríamos más.
Una obra aparcada es el desdoblamiento de la N-240 de Lleida a Les Borges. ERC no lo ve claro, ¿qué proponen? Un 2+1: aumentar un carril y que sea de una u otra dirección según el tramo. Entendemos que hay necesidades de conexión con la zona industrial y de refuerzo de la seguridad. También lo creemos para la N-230.
Pero no figuran en la encomienda de gestión. Priorizamos la N-260 porque es una de las carreteras más peligrosas del Estado y porque hace la función de conectar los distintos valles del Pirineo. Es una apuesta por repoblar y frenar la despoblación.
Esquerra ha pedido la reforma del Senado e incluso en 2017 pidió su eliminación. ¿Aún lo sostienen? El Senado español no hace una función de cámara de representacon territorial. De hecho, la única vez que hizo una función que tenía que ver con algún territorio fue para aprobar el 155 contra Catalunya. Aprovechamos las instituciones, son un instrumento para trabajar por la gente y mejorar las condiciones de vida de la gente pero nuestra apuesta es por su supresión. Aún así, no es nuestra batalla, Lo nuestro es alcanzar la república catalana.