Agramunt finalizará en agosto las obras de las dos primeras viviendas sociales en el antiguo cuartel de la Guardia Civil
El edificio acoge una visita y un acto simbólico para ver cómo avanzan los trabajos a cargo de los estudiantes del ETSAV
Las obras para transformar el antiguo cuartel de la Guardia Civil en Agramunt en un edificio con viviendas sociales y servicios municipales avanzan a buen ritmo. De hecho, las dos primeras viviendas prevén estar listas a finales de agosto, aunque no entrarían en funcionamiento hasta al menos el 2024, según ha afirmado la alcaldesa del municipio, Sílvia Fernández. El edificio ha acogido este miércoles una visita guiada y un acto simbólico para ver como adelantan las obras, a cargo de una treintena de estudiantes de la Escola Tècnica Superior d'Arquitectura del Vallès (ETSAV) de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). Han asistido la misma Fernández y representantes de la Associació Alba, futuros gestores del nuevo equipamiento, así como vecinos.
El proyecto tiene el objetivo de dar un uso social al antiguo cuartel de la Guardia Civil, que cerró hace veinte años y hace diez que es de propiedad municipal. La rehabilitación consiste en diseñar y construir viviendas sociales, destinadas a las personas con discapacidad o en riesgo de exclusión que atiende la Associació Alba. La planta baja del nuevo edificio incluirá también las dependencias de la policía local y los espacios para servicios sociales del ayuntamiento del municipio.
El Ayuntamiento de Agramunt ha señalado que las dos primeras viviendas quedarán habilitadas a finales de verano, pero sin servicios comunes como la climatización y ascensores, instalaciones que el consistorio quiere financiar con ayudas económicas por parte de las administraciones. Por este motivo, la alcaldesa Sílvia Fernández ha apuntado que la fecha para que las viviendas entren en funcionamiento dependerá de las subvenciones que les puedan otorgar y también de lo que se demore la tramitación de los permisos pertinentes. En todo caso, "nos gustaría que al menos las dos primeras viviendas se pongan en marcha el próximo año", deseó.
Lo que sí depende del consistorio son las obras para habilitar los servicios sociales y dependencias de la Policía Local. En este sentido, Fernàndez detalló que se incluirán las partidas para financiar los trabajos en el presupuesto del año 2024 y probablemente también en el del 2025. "Es un proyecto de legislatura", expresó.
Experiencia para los estudiantes de la ETSAV
Una treintena de alumnos del proyecto Vibra de la ETSAV lideran la construcción del nuevo equipamiento agramuntino. La iniciativa comenzó en julio del 2021 y, desde hace tres meses, el equipo está trabajando en las labores de derribo y limpieza del edificio. También se ha realizado un proceso participativo para que el vecindario realice sus aportaciones.
Una de las estudiantes participantes, Aroa López, ha explicado que ésta es una oportunidad única para aprender, ya que les permite mejorar mucho sus habilidades como arquitectos. "La universidad nos da una experiencia en el campo teórico, pero no nos ponemos a construir y esto es un error porque cuando trabajas sobre el terreno te das cuenta de muchas cosas que a la hora de diseñar las puedes hacer mucho mejor, que si sólo las estudias en un libro".
Edificio sostenible
La rehabilitación del edificio se lleva a cabo de forma sostenible y con el objetivo de que sea eficiente energéticamente. Concretamente, los estudiantes han reutilizado para la construcción diversos materiales que quedaban del antiguo cuartel y se han instalado nuevos hechos a partir de elementos como algodón reciclado de ropa ya utilizada.
Visita de obras
El edificio ha acogido un acto simbólico para colocar la "primera piedra" del proyecto y una visita guiada para conocer las obras a las que ha asistido Daniel Crespo, párroco de la UPC; Silvia Fernández, alcaldesa de Agramunt; Pere Fuertes, director de la ETSAV, y Martí Obiols, profesor de la misma escuela y tutor del proyecto, junto con el grupo de estudiantes, así como representantes del Consell Comarcal del Urgell, de la Associació Alba, de diferentes patrocinadores y vecinos.