EN JUEGO PARA LLEIDA
Rodalies que no mejoran
Los abonos gratuitos de Rodalies han disparado el número de usuarios en los trenes que Renfe opera en Lleida. Aún así, las incidencias son muchas y el servicio no mejora por la bronca en este punto entre Estado y Generalitat
Una media de 3.315 usuarios utilizan cada día una de las tres líneas de tren que opera Renfe en las comarcas de Lleida (R-12, R-13 y R-14). En el primer semestre de este año, la línea de Manresa registró 190.600 usuarios en Lleida y las de la costa, 406.100 pasajeros, lo que supone respectivamente un 22% y un 37% más que en 2019 (último registro comparable al ser el de antes de la pandemia). Para la operadora pública, esto supone una señal de confianza y también un indicador del buen resultado de los abonos gratuitos en Regionales (del 50% en los Avant) desde el pasado septiembre.
Los abonos se expiden por cuatrimestre, y en el actual Renfe tiene registrados en Lleida 5.100 abonos gratuitos, según la compañía. Estas cifras para el optimismo contrastan con las de las frecuencias en el tramo Lleida-Cervera, todavía por mejorar, y con las de las incidencias en Rodalies en Lleida. Una estimación reciente (elaborada a partir de datos de Renfe relativos al periodo entre enero y octubre del año pasado) sitúa la cifra de averías o incidentes que requirieron traslado de los viajeros afectados en autobús en 70 para diez meses, una media de siete cada semana.
En cuanto a las frecuencias, la primer vez que se habló de las nuevas cercanías en Lleida fue en septiembre de 2020 para anunciar que Ferrocarrils de la Generalitat invertiría 60 millones de euros, destinados entre otros proyectos a la nueva estación de autobuses de Lleida y a la compra de 4 trenes nuevos para la línea de Manresa con el objetivo de operarlos en 2024.
Hace años que el Gobierno transfirió a la Generalitat la gestión de la red de Rodalies pero, según denunció el ejecutivo catalán, no los fondos. Ambos proyectos (los nuevos trenes y la estación de Lleida) se están tramitando pero FGC no prevé asumir el servicio hasta 2025. Mientras tanto, Generalitat y Estado polemizan regularmente y con frecuencia sobre la paralización de la mejora del servicio, de modo que se atribuyen mutuamente la culpa de no mejorar las frecuencias en el caso de la línea de Manresa, donde deben pasar de las seis actuales (tres hasta Cervera y tres más hasta Barcelona) a doce.
Para el Govern, se trata de una clara falta de voluntad por parte del Estado de mejorar la línea. De hecho, la operadora considera que al margen de los datos de 2022 la Generalitat debe a Renfe más de 150 millones de euros por los servicios de Rodalies y que está pendiente firmar un contrato programa para la gestión de la red. Renfe, asegura el Estado, tiene la capacidad técnica y los recursos para poner en marcha las ‘nuevas’ Rodalies.
Solo espera que el Govern atienda sus peticiones. La Generalitat, mientras, ha puesto sobre la mesa dos millones de euros para pagar los servicios que costaría, según sus datos, duplicar las frecuencias en la línea de Manresa. Al margen de las deficiencias del servicio, las estaciones sobre todo de esta línea han ido cerrando en los últimos años hasta quedar abiertas y con personal para la venta de billetes únicamente Cervera y Lleida.
Después del cierre de la de Bell-lloc, donde el personal se ha ido por la automatización del servicio y en consecuencia el edificio ya no abre, solo la estación de Tàrrega abre a ratos durante el día para que los usuarios puedan comprar los billetes en la expendedora. Instituciones y sindicatos como CCOO claman por una modernización tan polémica como urgente.
Lleida reclama más frecuencias en trenes AVE y billetes más baratos
La Diputación, ayuntamientos y usuarios reclaman más frecuencias de trenes AVE y de Avant y recuperar las circulaciones de alta velocidad que había antes de la pandemia entre Lleida y Barcelona.
También piden aplicar mecanismos para que los billetes sean más baratos (hasta Barcelona cuestan unos 40 euros y hasta Madrid, aproximadamente 90). El pasado 20 de febrero se celebraron los 15 años de la entrada en servicio del AVE entre Madrid y Barcelona, con parada en Lleida ciudad. Los usuarios, por su parte, critican el encarecimiento de los billetes y que hay trenes que son antiguos y vibran.
Además, desde CCOO destacan que el Avant, pese a ser sercivio público, recibe menos subvención que los trenes de Rodalies y regionales. Señalan que si se aplicara la subvención de los Rodalies a los Avant, el precio base del billete entre Lleida y Barcelona bajaría de 31,5 a 20,10 euros y el abono mensual pasaría de 542 a 285 euros.Asimismo, tanto los viajeros como las instituciones reivindican también que los trenes low cost de las dos empresas privadas que operan en el corredor entre las capitales española y catalana (la francesa Ouigo y la italiana Iryo) paren en Lleida. El único tren de alta velocidad de bajo coste que sí que para en la ciudad es el de Renfe, el Avlo.
Mientras, los nuevos trenes AVE que circulan entre Madrid y Marsella no tienen parada en Lleida pese a que sí que la tienen en las terminales de Tarragona, Barcelona, Girona y Figueres.