ELECCIONES
Una campaña inédita donde el mercurio marcó el ritmo
Los partidos han pedido el voto en plena canícula y aún negociando tras las municipales || En 2 semanas apenas han habido debates
El alcalde de Madrid, Martínez-Almeida, de visita a Lleida
El mismo día en que se anunció el adelanto electoral ya se preveía que tendríamos una campaña atípica, y así ha sido. Y es que el hecho inédito de que vayamos a las urnas en julio no ha sido el único condicionante de esta campaña, mensajes políticos aparte. Además de coincidir con las vacaciones de muchos leridanos, la campaña en la provincia ha estado marcada por la ola de calor, especialmente dura estas semanas, con temperaturas récord.
Un hecho que, pese a que se podía prever, obligó a los equipos de campaña a recalcular agendas para que los mítines no coincidieran con las horas de máximo calor y a buscar espacios más frescos o a cubierto del sol para evitar percances entre los asistentes. A pesar de ello aguantar algún que otro acto fue más difícil de lo esperado y la botella de agua, el abanico y el antimosquitos se convirtieron en elementos indispensables para el público asistente. Otro hecho clave que ha condicionado la campaña es que, mientras los candidatos al Congreso y al Senado preparaban su agenda de actos y pedían el voto, sus compañeros del mundo local negociaban el cartapacio de ayuntamientos o los pactos en los consells comarcals y la Diputación.
Un factor que seguro motivó que los primeros días de campaña algunos andaran con pies de plomo en sus declaraciones, no fuera el caso de que se dinamitara alguna negociación. A la vez, en esta campaña han habido pocos debates, solo los imprescindibles. Un hecho que contrasta con la de las pasadas municipales, cuando los candidatos y la ciudadanía estaba todavía “frescos” y hubo debates de todos los sectores, ámbitos y puntos de vista posibles.
Por otro lado, el mantra de que Lleida es “la gran olvidada” de Catalunya se confirmó una vez más en esta campaña, ya que ni Pedro Sánchez (PSOE) ni Yolanda Díaz (Sumar) o Santiago Abascal (Vox) han pisado la provincia en estas dos semanas. Solo Alberto Núñez Feijóo (PP), que visitó Gimenells en un acto del sector primario, así como los candidatos de los partidos independentistas, pisaron Lleida durante la campaña para apelar cada uno a su votante.
La foto del grupo SEGRE: rumbo a Madrid para representar a Lleida
La estación de trenes Lleida-Pirineus y su entorno han sido el escenario de la tradicional foto de SEGRE a los candidatos por Lleida.
Los cuatro candidatos: Inés Granollers (ERC), Isidre Gavín (Junts), Montse Mínguez (PSC) y Natàlia Torres (Espai CiU) posaron ante las letras gigantes de Lleida con la estación de trenes al fondo, simbolizando que se dirigen a la capital estatal en representación de los leridanos. La instantánea se tomó tras el debate del Grup SEGRE y alguno aprovechó para lanzar algún recado de última hora: “Mirad que no me clave un puñal más en la espalda”, ironizó Gavín a Mínguez, a lo que esta respondió riendo y simulando que lo apuñalaba.
