Los arqueólogos descubren la entrada al poblado medieval de Llardecans

Los trabajos en el antiguo poblado medieval de Llardecans, que se han desarrollado en los dos últimos meses, han dejado al descubierto la que fue la antigua entrada a la aldea próxima al Arc d’Adar, así como la ubicación de corrales para el ganado, según explicó el responsable de las excavaciones, Javier Escuder. Desde el pasado mes de junio se ha estado analizando la trama urbana del poblado del siglo XIV, del que no quedan construcciones en pie aunque sí la delimitación en el suelo de lo que fue la calle Major y la muralla. Por otra parte, las intervenciones que se llevaron a cabo durante el pasado año en la zona de la ermita de Sant Marc, del siglo XVIII, también han puesto al descubierto la ubicación de la antigua plaza del pueblo, explicó Escuder.

Las actuaciones para el estudio de la zona están impulsadas por el ayuntamiento con la colaboración de técnicos de la Diputación y finalizarán en los próximos días. Este sábado se ha organizado una jornada de puertas abiertas a partir de las 9 de la mañana para que los vecinos y otros interesados puedan observar los nuevos descubrimientos. El estudio en el poblado medieval d’Adar comenzó en 2019 tras las obras de reconstrucción del Arc d’Adar.

Cabe recordar que un camión lo destrozó al chocar con él y tuvo que ser reconstruido piedra a piedra. Tras finalizar esta operación comenzaron las intervenciones en el poblado medieval próximo, al considerarse una construcción singular en esta zona del Segrià. Con este fin se comenzó a buscar restos del entramado urbanístico, que ya ha quedado al descubierto y en años posteriores se ha profundizado en la investigación de lo que eran y donde se encontraban los elementos urbanísticos principales como la vía principal, la plaza o las construcciones agrarias.