CELEBRACIONES TRADICIÓN
Las fuentes de Sant Magí están secas
Dejan de manar por la sequía y la organización del tradicional reparto del agua en Cervera teme por la fiesta || Mientras la parroquia repara el templo dedicado al santo
Las fuentes de Sant Magí de Brufaganya han dejado de manar por la sequía. Están secas cuando faltan dos semanas para que Cervera celebre el reparto anual entre los vecinos de este agua, a la que la tradición atribuye cualidades milagrosas. “Confiamos en que llueva, ya que por primera vez en la historia podríamos quedarnos sin repartir el agua”, explicó Josep Mas, miembro de los Amics de Sant Magí, organizadores de esta fiesta que se remonta al siglo XVI.
La fiesta de la Entrada de l’Aigua está prevista para el día 18, y el reparto para el 19. Los organizadores de la celebración barajan ya una alternativa por si el agua no ha vuelto para entonces a las fuentes: pedirla a la compañía de aguas de Tarragona, ciudad que también reparte el agua de Sant Magí.Explicaron que esta empresa tomará el agua de Brufaganya de pozos donde se acumuló antes de que las fuentes se secasen y la someterá a un tratamiento de potabilización para asegurarse de que es apta para el consumo humano. Esto permitiría mantener el tradicional reparto de Cervera si no llueve en las próximas semanas.Entre tanto, la parroquia de Cervera está instalando un nuevo tejado en el templo de Sant Magí.
El párroco, Xavier Romero, explicó que la tormenta Gloria afectó a principios de 2020 a parte de la cubierta y que una revisión de los daños puso de manifiesto el mal estado en la nave central, que se renovará por completo.Las obras incluyen una cornisa en el campanario y la reparación de grietas en los muros causadas por la humedad. Los trabajos deberán acabar en septiembre y obligarán a trasladar los actos previos y la misa de las fiestas de Sant Magí a la parroquia de Santa Maria. El proyecto tiene un presupuesto de unos 70.000 euros, cuenta con el respaldo de la asociación Amics de Sant Magí y con las aportaciones económicas del obispado, la Conferencia Episcopal, el Institut d’Estudis Ilerdencs y la Generalitat.
Por su parte, la Paeria de Cervera ha redactado el proyecto de rehabilitación.