Más de 1.300 personas van cada día a las 6 piscinas municipales de la capital

El ayuntamiento de Lleida ciudad adelantó este verano la apertura de sus seis piscinas municipales al 13 de junio y desde entonces más de 1.300 leridanos las visitan cada día. Las que tienen más público son las de Balàfia y Cappont. Son las que atraen más bañistas, con más de 16.600 desde su apertura hasta principios de esta semana.

Les siguen la de Pardinyes, con algo más de 12.700, la de La Bordeta, con 10.000, la del Secà de Sant Pere, que ya lleva más de 9.200, y la de Magraners, con más de siete mil usuarios. El horario de las piscinas va de las once de la mañana hasta las siete y media de la tarde y los momentos con más afluencia de público son las horas en las que suele hacer más calor, entre las cuatro y las cinco de la tarde. Solo en esta franja horaria se han vendido 16.972 entradas en todas las piscinas de la ciudad este verano.

Esto supone el 23% del total, que asciende a 72.180.La entrada cuesta 3,4 euros y el bono de temporada 66,6 euros. No obstante, los mayores de 65 años y los menores de 3 tienen la entrada gratuita, algo que hasta ahora ha beneficiado a 7.154 usuarios de la tercera edad y a 2.739 niños y niñas. Además de comprarla en taquilla se puede reservar online una plaza a través del portal www.piscines.paeria.cat.

La Paeria lo habilitó durante la pandemia de la Covid para evitar que los usuarios superasen los aforos. La mayoría de bañistas valoran muy positivamente el mantenimiento y estado de las piscinas, pero critican que cierran muy pronto. “A las 19.30 todavía suele hacer calor y el ayuntamiento solo amplió los horarios de las piscinas la semana que superamos los 40 grados, se podría haber mantenido” lamentó una usuaria

El agua de la playa artificial de Ogern ha quedado como reserva para extinguir incendios

La sequía ha afectado a algunas de las zonas de baño de las comarcas leridanas.

Así, el ayuntamiento de Bassella ha decidido no abrir al público este verano la playa artificial de Ogern, al considerar que no podía garantizar la calidad del agua procedente del río Ribera Salada ante el descenso del caudal. El agua acumulada en este espacio ha quedado como reserva por si es necesaria para tareas de extinción de incendios. El pasado mes de julio, el consistorio desplegó carteles en la zona que informaban de la prohibición de bañarse, de acampar y de hacer pícnic en la zona para evitar riesgo de incendios.

Por su parte, la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) advierte que la calidad del agua del pantano de la Torrassa, en los términos municipales de Espot y La Guingueta d’Àneu, es insuficiente para bañarse en ella. El descenso del nivel del agua en periodos de sequía favorece la proliferación en este embalse de una planta invasora de origen canadiense que favorece un aumento en la concentración de bacterias. En cambio, en el resto de zonas de baño de interior catalogadas por la Generalitat en zonas del pantano de Sant Antoni, el de Sant Ponç y el Segre a su paso por Camarasa, el ACA califica la calidad del agua de “excelente”.

Tanto este organismo de la Generalitat como la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) advirtieron el pasado mes de junio del riesgo que comporta bañarse en orillas enfangadas de los embalses, que han aflorado a la superficie al descender el nivel del agua por la sequía. Ambos destacan el riesgo de quedar atrapado en el barro tanto en zonas habilitadas para el baño como en las que no lo están y, por este motico, piden a los bañistas que aumenten las precauciones «A las siete aún hace calor»“Las piscinas están muy bien mantenidas y este verano no está siendo tan agobiante como otros, en los que había mucha más gente. Nos hemos sacado el bono y venimos casi cada día con mi nieta.

En las de Balàfia se está tranquilo. El único inconveniente es que cierran muy pronto, hace falta un horario más largo sobretodo por la tarde, porque a las siete y media aún hace calor”.

«Están muy bien cuidadas»“Es la primera vez que venimos a las piscinas de Balàfia y están muy bien.

El hecho de que ahora no hay que hacer reserva online obligatoriamente también hace que todo sea mucho más sencillo. En general en Lleida tenemos unas buenas piscinas y están muy bien mantenidas. Lo único malo es el horario, no se entiende que en Lleida las cerremos tan pronto, deberían cambiarlo”.