Más de 500 personas reivindican el catalán y el occitano en la 36 subida al Port de Salau

Como cada primer domingo de agosto y desde hace 36 años, unas 500 personas procedentes de diferentes puntos de Catalunya y de la región de la Occitania francesa se congregaron ayer a más de 2.100 metros de altitud para celebrar la Pujada al Port de Salau. Una ascensión en la que se reivindicó la defensa del catalán y el occitano frente al auge de la extrema derecha. La jornada también tuvo un carácter festivo en la que se conmemoraron los lazos de hermandad y las relaciones culturales y comerciales que a lo largo de la historia ha habido entre los valles pirenaicos catalanes y occitanos.

Como principal novedad, para la edición de este año se ha entregado a los participantes una camiseta conmemorativa de la ascensión. La secretaria general del Cercle d’Agermanament Occitano-Català (CAOC), Esther Lucea, recalcó que “no queremos que el catalán y el occitano pierdan el espacio que han logrado en los ámbitos de la educación y la cultura”, recordando el veto a las revistas en catalán que ha habido en Borriana (Comunitat Valenciana), por parte de su ayuntamiento, gobernado por PP y Vox. Lucea apuntó que el occitano y el catalán son lenguas “minorizadas y perseguidas” por sus respectivos estados e hizo un llamamiento a todos los asistentes de la necesidad de protegerlas y garantizar su presencia en todos los ámbitos de la sociedad.

Respecto a la ascensión al puerto, el punto de encuentro fue la zona que une el Pallars Sobirà con el departamento francés de Arieja y solo se puede acceder a pie. Por el lado catalán, los puntos de partida de la subida al puerto fueron el Refugi del Fornet, a unos 4 kilómetros y con un desnivel de 710 metros, y el aparcamiento de Pont de Perosa, a 6,5 kilómetros y 620 metros de desnivel. Por el lado francés, se debe pasar por el pueblo de Salau, en una ruta de más de 4 horas de duración y un desnivel de más de mil metros.

Al mediodía se izaron las banderas catalana y occitana para dar paso a los parlamentos de las entidades organizadoras. Lucea concluyó que este encuentro es “la ocasión ideal en la que podemos hablar occitanos y catalanes y reivindicar nuestra lengua y cultura”. Una vez acabados los discursos de los organizadores, los asistentes compartieron elementos culturales y gastronómicos catalanes y occitanos como la música, la danza, el vino o el queso, entre otros.

La jornada acabó con todos los asistentes entonando L’hora dels adéus y con una foto de familia. Como previa, el Ecomuseu de las Valls d’Àneu fue escenario de varias actividades, como una conferencia del director del Parc Natural de l’Alt Pirineu, Marc Garriga, y un concierto de baile de música tradicional.

Una jornada de hermandad entre los dos territorios

La ascensión al Port de Salau es un encuentro que se celebra desde hace más de 30 años con el objetivo de estrechar lazos entre las comunidades catalanas y occitanas, así como defender sus lenguas y rememorar la historia común en materia de cultura y comercio que tienen estos dos territorios.