Proliferan proyectos en Lleida para convertir antiguas masías en casas de turismo rural

Proyectos para convertir antiguas masías en alojamientos de turismo rural han proliferado en el último año en las comarcas de Lleida. Hay más de una decena de propuestas sobre la mesa de la Generalitat y ayuntamientos para rehabilitar estas construcciones y darles un nuevo uso como establecimientos turísticos. El Solsonès concentra una gran parte de ellas, pero también las hay en municipios del Pallars Sobirà, la Segarra, la Noguera y el Alt Urgell.

En esta última comarca se plantea también incluir en catálogos municipales de masías los restos de antiguas construcciones en suelo rústico, como primer paso para poder rehabilitarlas en el futuro. En el Solsonès, el municipio de Odèn es escenario de cuatro proyectos para nuevos alojamientos rurales que han iniciado su tramitación desde 2022. Tres de ellos han superado ya su tramitación ambiental ante la Generalitat, mientras que un cuarto ha chocado con un informe desfavorable del departamento de Acción Climática, al considerar que estaba en una zona inundable y presentaba riesgo en caso de riadas.

También en esta comarca se tramitan propuestas para casas de turismo rural en los municipios de Olius y Biosca. En este último, que hasta hace un mes formaba parte de la Segarra, también está prevista la construcción de un nuevo camping.En el Pallars Sobirà, Alt Àneu tiene al menos dos proyectos para nuevas casas de turismo rural. Uno de ellos prevé habilitar un hotel rural de cuatro estrellas en las construcciones de la Borda Socampo, una propuesta que ha recibido una declaración de impacto ambiental favorable de la Generalitat después de doce años de tramitación y que chocó en su día con oposición vecinal y ecologista (ver desglose).

Otro proyecto distinto plantea usar una edificación mucho más moderna, un almacén en desuso en el municipio, para acoger talleres artesanales, un establecimiento de restauración y alojamientos de turismo rural. Los municipios de Esterri d’Àneu y Rialp son también escenario de proyectos en la comarca para alojar a turistas en antiguas edficaciones. En La Noguera, la comisión de Urbanismo aprobó el pasado mes de julio el proyecto para restaurar el conjunto de edificios conocido como la Casa del General de La Sentiu de Sió para turismo rural.

En la Segarra, este mismo organismo de la Generalitat dio el visto bueno en 2022 al proyecto para rehabilitar para usos turísticos una masía en el municipio de Torrefeta i Florejacs. También lo recibió ese mismo año el plan para recuperar como alojamiento para visitantes la Masia de Cal Nen de Coll de Nargó, en la comarca del Alt Urgell.

De antiguas bordas a hotel rural de cuatro estrellas

La Generalitat ha dado autorización ambiental al proyecto para habilitar un hotel rural de cuatro estrellas en las construcciones de la Borda Socampo de Alt Àneu.

Para conseguirla, los promotores han presentado cuatro proyectos distintos a lo largo de 12 años, y en cada uno han rebajado las previsiones de habitaciones y superficie construida. El cuarto es el que ha obtenido el visto bueno ambiental y espera el de Urbanismo. Prevé ocho habitaciones, frente a la decena de la propuesta anterior, del año 2017. Asimismo, la superficie construida pasaría de los cerca de 1.500 metros cuadrados previstos hace 6 años a los poco más de mil actuales. Incluye un establo para caballos y un grupo electrógeno, paneles solares y una caldera de biomasa.