Tornabous estrena un observatorio de aves construido por voluntarios

El Parc del Reguer de Tornabous ha pasado en solo tres años de ser un yermo a tener actividades todo el año. Ahora este espacio ha estrenado un observatorio de aves. Nando Farré, el alma del proyecto, explicó que este equipamiento lo han diseñado y construido voluntarios con materiales reciclados, desde la banqueta interior, que antiguamente estaba en la entrada del parque y que un vecino instaló en el centro de la población, hasta el cañizo de la cubierta o las maderas de palets que hacen de paredes.

Entre las anteriores actuaciones que se han llevado a cabo, destacan la construcción de más de un centenar de cajas para alimentar a las aves y la plantada de árboles adquiridos por los vecinos. El proyecto ha contado con el apoyo de la Diputación y del consistorio, que han habilitado un parque de gimnasia para mayores y una zona de picnic con barbacoa en el parque. Farré avanzó que el próximo proyecto consiste en instalar unos lavabos en la entrada del parque para que los visitantes dispongan de instalaciones adecuadas.El ayuntamiento diseñó el Parc del Reguer en 2010, en la antigua zona de huertos.

Con la pandemia, propusieron a Farré que saliera a caminar con las personas mayores. “Íbamos los martes y optamos por hacerlo por la zona del parque a la sombra de los árboles”, dijo. Fue entonces cuando un grupo de voluntarios inició la limpieza de este lugar semiabandonado.

En tres años, el grupo de voluntarios se ha convertido en una entidad con 140 socios que celebra cada mes de mayo el Aplec del parque y en Navidad presentan su propio pesebre creado con material reciclado.