El comercio de Andorra pide más control en el pago del IGI

El comercio de Andorra reclamó ayer un “control intensivo” en la aduana de la Farga de Moles para comprobar que los residentes en el Principat que introducen mercancías por la frontera y se desgravan el IVA declaran el porcentaje correspondiente del IGI (equivalente al IVA español pero con un gravamen inferior, de hasta el 4,5%). Los establecimientos de Andorra insisten en que reforzar la declaración del impuesto puede ayudar a limitar las compras fuera del Principat y potenciar el comercio local. Recordaron que efectuar el tax-free es un derecho de los residentes, pero que va acompañado de la obligatoriedad de pagar el IGI cuando la compra supera los 300 euros, y aseguran que “muchos residentes” no lo tramitan.

El ministro de Finanzas, Ramon Lladós, apuntó que tiene constancia de que hay ciudadanos que respetan esta obligatoriedad pero admitió que “no lo hace todo el mundo”. El Govern trabaja para disponer de una aplicación que facilite este trámite (ver SEGRE de ayer), pero los comercios consideran que “no es suficiente” y no beneficiará a sus negocios si no va acompañada de una regulación estricta.