Lleida supera las 6.000 plantas solares que generan energía para autoconsumo

Más de seis mil instalaciones de paneles solares producen electricidad para autoconsumo en Lleida, un millar más que hace apenas diez meses. Sumaban una potencia de 64 MW en marzo y su número ha crecido desde entonces, mientras proliferan nuevos proyectos para reducir el consumo procedente de la red eléctrica y rebajar los recibos de la luz.

Lleida ha superado las seis mil instalaciones de paneles solares para autoconsumo eléctrico y ha incorporado un millar en menos de un año. Así se desprende de los últimos datos de la Generalitat, que abarcan desde el año 2014 hasta el pasado 31 de marzo. Su número ascendía a 6.275, pero ha aumentado desde entonces. Particulares, empresas, ayuntamientos y comunidades de regantes han puesto en marcha en los últimos 5 meses paneles en las comarcas leridanas para reducir la electricidad que consumen de la red eléctrica, mientras proliferan nuevos proyectos. Las instalaciones de autoconsumo solar han aumentado en un 20% en apenas diez meses, pero su potencia total en este periodo casi se ha duplicado, al pasar de los 34,6 megavatios (MW) instalados a finales del año pasado hasta los 64 el pasado mes de marzo.

El peso del autoconsumo energético crece si se tiene en cuenta que no se limita a las placas fotovoltaicas. También funcionan en Lleida una planta de biomasa y cuatro de cogeneración cuya producción de electricidad se destina también a aligerar las facturas eléctricas de sus propietarios. La inmensa mayoría de la energía producida para autoconsumo se destina a un único inmueble.

Sin embargo, empieza a abrirse camino el autoconsumo compartido, una vez se han suavizado las severas limitaciones de la legislación española que lo habían frenado. Hasta el año 2021, había menos de una veintena de instalaciones este tipo en las comaras leridanas. En 2022 llegó un cambio decisivo: la distancia máxima para compartir electricidad autoproducida pasó de solo 500 metros a dos kilómetros.

Esto se notó de inmediato en Lleida. Entre 2022 y 2023 se desplegaron 87 instalaciones de placas solares compartidas. Las 104 que funcionan actualmente en apenas alcanzan los 900 kW de potencia, pero todo apunta a que su número y potencia también crecerá. Cada vez más ayuntamientos impulsan proyectos para dar luz a varios equipamientos públicos con una única instalación de paneles solares, mientras que cada vez más particulares se organizan en comunidades energéticas.

Desde tejados de casas hasta bombeos de regadíos

El autoconsumo solar en Lleida abarca desde pequelas instalaciones solares de menos de un kilovatio (kW)de potencia a dos de más de un megavatio (MW) en Bellpuig y Agramunt, según los registros de la Generalitat. Sus aplicaciones son también muy dispares: van desde reducir las facturas eléctricas de comunidades de vecinos y ayuntamientos hasta suministrar energía para naves industriales y bombear agua de riego.

El Garrigues Sud ha puesto en marcha este mes en Bovera la primera central solar que alimentará uno de sus bombeos eléctricos de agua. Es la primera de las siete previstas para reducir las millonarias facturas eléctricas que paga ahora esta comunidad de regantes. Los recibos de la luz le suponen más de 1,5 millones de euros al año, alrededor del 80% de su presupuesto total. Por su parte, el Segrià Sud está construyendo su segunda central solar de autoconsumo junto a la que ya funciona en Maials. Otros regadíos leridanos han instalado también paneles solares o se plantean hacerlo en el futuro.

Demora en ayudas y el Icaen dice que las pagará a partir de noviembre

Parte de las instalaciones solares construidas en Lleida se acogieron en su día a subvenciones del fondo Next Generation de la UE administradas por la Generalitat. Las líneas de ayudas superaban los 200 millones de euros e incluían desde administraciones hasta empresas y particulares para favorecer el autoconsumo y la eficiencia energética. Se presentaron más de 70.000 solicitudes en toda Catalunya, un alud que desbordó la capacidad de gestionarlas del Institut Català de l’Energia (Icaen). Desde entonces ha incorporado personal adicional para dar trámite a las solicitudes y, según publicó El País, el organismo de la Generalitat confía en hacer efectivos los primeros pagos a finales de este año, a partir del mes de noviembre. La demora ha provocado quejas entre los solicitantes de estas ayudas.

Acelerón a solares y eólicas para vender energía

La Generalitat ha autorizado casi un millar de hectáreas de paneles solares en las comarcas leridanas que se destinarán a la venta de electricidad. Son 38 centrales fotovoltaicas que suman 554 MW y la mayoría ha recibido el visto bueno en los últimos 4 meses. Hasta el pasado mayo, solo había 14 pequeñas plantas autorizadas con un total de 34 MW. Desde entonces, el Govern ha acelerado el proceso para dar permisos a las que llevan más tiempo en espera, para evitar que pierdan los puntos deconexión a la red eléctrica que tienen concedidos y acaben decayendo.