Un terremoto de 3,6 grados con epicentro en Cava y más de 80 réplicas sacuden el Pirineo

Un terremoto de 3,6 grados de magnitud con epicentro en Cava y más de 80 réplicas sacudieron ayer el Pirineo. El primer temblor se registró durante la madrugada del miércoles al jueves, concretamente a las 00.24 horas, y fue percibido en el norte del Alt Urgell y el este de la Cerdanya y el Berguedà. En el resto de estas tres comarcas también notaron el seísmo, aunque con menor intensidad, del mismo modo que en el Pallars Sobirà, el Solsonès, el Ripollès y Andorra. La alcaldesa de Cava, Gisela Sellés, explicó que “se movió todo”. Señaló que percibieron “una sacudida que no se sabía de donde venía” y destacó que el terremoto provocó “mucho ruido”, como si fuera una explosión. Sellés apuntó que también notaron el temblor de las 02.00 horas, que tuvo una magnitud de aproximadamente 2 grados. 

Por su parte, vecinos de La Seu aseguraron que se despertaron asustados al notar que temblaban la cama y los cristales. Según los datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN) el primer seísmo fue de 3,6 grados, mientras que el Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya (ICGC) rebajó la magnitud a 3,4. El IGN informó de un total de 84 réplicas entre la madrugada y la tarde de ayer. La gran mayoría tuvieron su epicentro en Cava, mientras que en una docena de casos se situó en el municipio vecino deArsèguel. Estas réplicas tuvieron magnitudes que oscilaron entre los 3,3 grados del que se registró a las 02.20 horas y los 1,5 del de las 14.26 horas. 

Por su parte, Protección Civil activó la prealerta del plan Sismicat y el teléfono de emergencias 112 recibió un total de 5 llamadas por los terremotos. El geógrafo y responsable de Meteo Pirineus, Albert de Gràcia, aseguró que los temblores de ayer entran dentro de la “normalidad” de una zona sísmica como el Pirineo. En este sentido, a finales de agosto la Val d’Aran también registró un seísmo de 4,1 grados, que tuvo un centenar de réplicas de menor magnitud. El pasado miércoles, un terremoto de 3,1 con epicentro en el sur de Francia sacudió varios pueblos de Aran. 

El Alt Urgell vivió el terremoto más intenso del milenio a principios de abril de 2019. En este caso, fue de 4,5 grados, el epicentro se situó en La Parroquia d’Hortó (Ribera d’Urgellet) y se llegó a percibir en Barcelona y en Huesca. De Gràcia también destacó que, en los últimos años, se han producido varios seísmos en la zona de Os de Civís (Les Valls de Valira). En el Pirineo hace más de 200 años que no hay un temblor de más de 6 grados. En noviembre se conmemoraron los cien años del terremoto más intenso del siglo veinte.