VIELHA
Prisión para un anestesista acusado de una agresión sexual en Vielha
Por sumisión química, según la denunciante
El hombre estaba de prueba en el Hospital Val d'Aran y fue despedido un día antes de los hechos por no ir a trabajar
Un hombre de 45 años acusado de un presunto delito de agresión sexual a una mujer por sumisión química, que fue detenido en Vielha por los Mossos d’Esquadra, está en prisión por orden judicial. Según informaron ayer fuentes policiales, el arresto tuvo lugar el pasado 11 de marzo tras tener conocimiento de que podría haber tenido lugar una agresión sexual tras la denuncia de la víctima. El detenido es un anestesista y había trabajado en el Hospital Val d’Aran, aunque las mismas fuentes señalaron que los hechos habrían tenido lugar fuera del centro hospitalario.
Al respecto, el Conselh Generau d’Aran señaló ayer, en un comunicado, que el detenido trabajó solo durante cuatro días en el Hospital Val d’Aran “siempre acompañado por otros facultativos y nunca entró en contacto con pacientes”. Asimismo, afirmaron que se encontraba en periodo de acogida y que fue contratado cuatro días antes de los hechos y que contaba con buenas referencias médicas y con el certificado de penales en regla. También señaló que se le rescindió el contrato un día antes de la presunta agresión, al no haber superado el periodo de prueba marcado por contrato, por no haberse presentado a trabajar durante dos días.
En el comunicado, el gobierno de Aran también quiso mostrar su apoyo a la víctima y “su compromiso para erradicar todo tipo de violencia hacia las mujeres para conseguir una sociedad más igualitaria”. Las mismas fuentes policiales señalaron que tras su detención, el hombre pasó a disposición del Juzgado de Vielha y el juez decretó su ingreso en prisión provisional continuada y sin fianza. La investigación continúa abierta y se harán más diligencias, según señalaron fuentes judiciales. El pasado agosto, los Mossos d’Esquadra arrestaron a un supuesto osteópata de 60 años acusado de presuntas agresiones sexuales a siete clientas en un centro del barrio leridano de La Bordeta. El hombre quedó en libertad con cargos tras comparecer ante el juez. Las pesquisas policiales se iniciaron dos meses antes, cuando una víctima denunció al detenido. La Policía catalana había registrado nueve denuncias que corresponderían a siete víctimas.