Cerca de 80 campaneros en la Trobada de Os con toques a favor de la payesía

Más de 1.500 personas se congregaron ayer en la plaza de la iglesia de Os de Balaguer en la XXXVII edición de la Trobada de Campaners que reivindica el toque manual de las campanas reconocido por la Unesco. Hasta esta población de la Noguera se desplazaron campaneros de Catalunya, Andorra, Castilla-León y el País Vasco.

Cerca de 80 campaneros venidos de distintos puntos de Catalunya, Andorra, Castilla-León o el País Vasco, entre otros lugares, acudieron ayer a Os de Balaguer para participar en la XXXVII edición de la Trobada de Campaners que reivindica el toque manual de las campanas. Comenzaron a llegar sobre las 10 de la mañana y esperaron su turno para hacer sus toques en el campanario de la iglesia de Sant Miquel. “La tradición se consolida y es una celebración muy estimada donde cada uno hace su aportación especial”, explicó la alcaldesa, Estefania Rufach. “Hay campaneros con edades comprendidas entre los nueve años, como es el caso de los de Cervera, hasta los que rondan los ochenta y que impulsaron esta tradición. La supervivencia está garantizada”, remarcó Rufach.

La demostración de toques comenzó sobre las diez de la mañana y duró hasta casi la una del mediodía. El toque final lo hicieron los jóvenes campaneros de la población en honor a la payesía para animar a los agricultores a proseguir en su labor pese a las numerosas dificultades por los que atraviesa el sector. Felisa Corredera, de Yudego, es hija y nieta de campaneros y asegura que el porvenir de la saga está asegurada “porque es algo que llevas dentro”. Por su parte, José Luis Albizua, de Amurrio, en Álava, aseguró que lleva muchos años fundiendo y tocando campanas y destacó que celebraciones como la de Os “consiguen juntarnos a todos y mantener un sonido que ya es historia”. 

La población también rindió homenaje al maestro fundidor Abel Portilla, de Cantabria, que ha elaborado manualmente varias campanas para la población y que se distinguen porque tienen “un sonido ancestral como las de antes”, indicó. Escultures en moviment es la exposicion que Portilla muestra en la sala del consistorio hasta el próximo 12 de mayo. La jornada contó con una comida popular a la que asistieron unas 400 personas y por la plaza de la iglesia llegaron a pasar unas 1.500 personas. Durante toda la mañana hubo venta de productos de proximidad en una veintena de paradas que ocuparon el centro histórico.

Una práctica ancestral y protegida

La Unesco declaró en diciembre de 2022 el toque manual típico de Os y de otras pobaciones de España Patrimonio Cultural Inmaterialde la Humanidad. Es una tradición sostenida actualmentepor ayuntamientos, grupos de voluntarios y vecinos. Además, la ancestral práctica es uno de los reclamos turísticos de esta población de la Noguera que ha sabido mantenerla y conseguir que los jóvenes la preserven y le den continuidad. De hecho, ellos fueron los encargados del toque final en favor de la payesía en la jornada de ayer. Los campaneros ejecutaron toques de fiesta, de ánima y de vigilia, entre otros. También se sorteó una campana elaborada por Abel Portilla.