Cuatrocientos vecinos rechazan la planta de biometano de Albelda

Un total de 410 vecinos de Albelda (702 habitantes) y de localidades cercanas han firmado un documento de alegaciones que se opone a la instalación de la planta de biometano que promueve la empresa Ecobiostar en su término municipal.

Las alegaciones, coordinadas por la Asociación de Afectados por la Planta de Biometano y Tratamiento de Residuos, han sido presentadas ante el Inaga (Instituto Aragonés de Gestión Ambiental), que debe pronunciarse sobre la sostenibilidad de la iniciativa.“Va a haber un periodo de silencio muy largo” por el atasco de expedientes que se da en el Inaga, señaló Alba Garreta, presidenta de la plataforma, quien defiende el rechazo al proyecto: “en Albelda ya tenemos dos plantas de tratamiento de residuos. Es una cuota suficiente, no hemos de soportar más”.Los principales factores de inquietud provienen de la intensidad del tráfico de vehículos pesados que generará el transporte a la planta de las 51.000 toneladas de purines y otros residuos que preven procesar, con un volumen de 7.300 camiones anuales; así como la cercanía de las instalaciones a un tramo del Camino de Santiago y a varias viviendas y el hecho de que incluyan tres tanques de gas de 5.000 metros cúbicos cada uno y una chimenea-antorcha de ocho metros de altura.También ha generado inquietud el listado de residuos susceptibles de ser procesados en la planta para fabricar gas, que incluye los procedentes de fosas sépticas, los industriales urbanos (cloacas) y los de limpieza.“Hay una vivienda a 150 metros y varias a 200, y viven 200 vecinos en un radio de 800 metros”, señalan desde la plataforma.En la elección de la ubicación ha pesado el hecho de que discurra paralela a la parcela elegida para un gasoducto al que Ecobiostar podría conectarse para verter su producción. También se encuentra en las inmediaciones del solar una tubería de riego de 500 litros de caudal que opera a seis bares de presión.