Los pantanos de Lleida a rebosar y Rialb ya al 50%, pero con el desfiladero de Mont-rebei todavía sin navegación

El desfiladero de Montrebei, en el valle de la Noguera Ribagorçana entre Cataluña y Aragón (Àger y Viacamp), y una de las joyas del turismo de la provincia de Lleida que recibe centenares de visitantes cada semana, todavía no permite la navegación por las aguas del pantano de Canelles por el bajo nivel de agua, ya que actualmente está al 28% de la capacidad. Y para navegar necesita, como mínimo, que haya un 50% de agua.

Va recuperandose. Hace pocos meses no llegaba al 18% de su capacidad (hoy 28%), y por encima, el pantano de Escales se encuentra al 94% y por debajo el de Santa Anna tiene agua al 86% de su capacidad.

Eso no impide a los visitantes acercarse a hacer su singular ruta por la roca excavada. De hecho, SEGRE publicaba hace unos días que el parking de Sant Esteve de la Sarga tenía todas las plazas reservadas.

Estado de los pantanos de Lleida: siguen llenándose

El pantano de Sant Antoni, en Talarn, en el Pallars Jussà, empezó el miércoles pasado a desembalsar agua al llegar a superar el límite de su capacidad, 227,675 hectómetros cúbicos. Hacía cuatro años que las compuertas del embalse de Sant Antoni no se abrían para soltar agua.

En la cuenca del Pallaresa, el pantano de Talarn, se encuentra al 100% de su capacidad, Terradets en el 97% y el de Camarasa al 82%. El total, la cuenca se encuentra al 92% de su capacidad.

En la cuenca del Segre, Oliana se encuentra en el 81% y el pantano de Rialb, por primera vez después de muchos meses supera el 50%. En total la cuenca se encuentra al 55%.

En la cuenca del Ribagorçana: Escales (84%), Canelles (28%) y Santa Anna (86%) suman 534 hectómetros cúbicos de agua y el 50% de su capacidad total.

Y finalmente Mequinenza suma 1.247 hectómetros, que son el 91% de toda el agua que puede almacenar.

📸 Fotografías

🌧 Lluvia y deshielo causan en la Pallaresa y el Segre la mayor avenida en 4 años

Los pantanos que regulan la Noguera Pallaresa han llegado al máximo de su capacidad y desde la semana pasada desembalsan hacia el Segre, río que, como su afluente, está registrando la avenida mayor en cuatro años.

Los 90,9 m3/s que llegaron a circular a las dos del mediodía del jueves pasado por la ciudad de Lleida no se alcanzaban desde el 19 de junio del 2020 y los 30 que pasaban por Balaguer sólo se habían superado desde la primavera del 2020 en cuatro momentos puntuales la semana pasada.

Y finalmente para encontrar un registro superior a los 79,3 que marcaba la medianoche del martes la Pallaresa a su paso por Collegats, aguas arriba del tramo embalsado, hay que remontarse en el mes de mayo de aquel año.

La inusual avenida hizo que el agua cubriera prácticamente la mitad del espacio de la canalización del Segre en Lleida y motivó un aviso de Protección Civil, que preguntó cautela a aquellos quiénes se encontraran cerca del curso. Lo explicaba Helena Culleré a 👇