Los Agentes Rurales intensifican la lucha contra el uso de venenos en el medio natural para reducir las muertes de aves protegidas
El cuerpo investiga la muerte este año de 17 ejemplares protegidos en la demarcación de Lleida supuestamente por rodenticidas
Un ejemplar de milano real muerto
Los Agentes Rurales han intensificado las actuaciones para luchar contra el uso de venenos rodenticidas prohibidos en el medio natural, una de las principales causas de pérdida de biodiversidad. Así, el cuerpo investiga actualmente las muertes presuntamente por envenenamiento de 17 ejemplares de aves protegidas en la demarcación de Lleida durante el 2024 y se está a la espera de los resultados toxicológicos. Una de las especies más afectadas en este territorio es el milano real, en peligro de extinción, de la cual se han detectado 10 ejemplares muertos por venenos en los últimos tres años. Esta especie tiene una concentración de población importante en tierras leridanas, sobre todo en las comarcas del llano, donde llegan ejemplares del centro y norte de Europa para nidificar.
El cuerpo de Agentes Rurales efectúa investigaciones muy regulares para evitar que los cadáveres de las aves muertas desaparezcan a causa de predadores y evitar muertes secundarias de otras especies. Para hacer esta tarea dispone de los agentes del Grupo Especial de Venenos y Antifurtivismo, del Grupo de apoyo de colaboración con la administración de Justicia así como de los perros del Grupo Especial Canino.
La utilización de venenos se considera una de las principales causas de pérdida de biodiversidad para diferentes especies, y muy especialmente para las aves rapaces, como en el caso del milano real. El veneno puede entrar a la cadena alimenticia por lo que representa un peligro para las personas, así como para otros animales salvajes y también para animales de compañía. Por este motivo, se hace un llamamiento a utilizar métodos legales para luchar contra las plagas de especies como son los roedores o los conejos y que no producen muertes indirectas o secundarias en el medio.
Por el contrario, la conservación de aves de rapiña permite mantener el equilibrio de poblaciones y el saneamiento de ecosistemas, como son las poblaciones de ratas y conejos, que pueden convertirse en plagas para la agricultura y la ganadería. Otra función ecológica de estas aves es el saneamiento animal, ya que se alimentan preferentemente de ejemplares envejecidos, enfermos o débiles, o incluso carroña de manera ocasional, evitando así la propagación de enfermedades.
Colaboración de la ciudadanía
En este sentido, el cuerpo recuerda que ante la sospecha de estar delante de un animal muerto probablemente por envenenamiento en ningún caso se tienen que manipular cebos o los mismos animales y pide que se llame inmediatamente al 112 o directamente a los Agentes Rurales a través del teléfono permanente 24 horas y 365 días el año que atiende las llamadas ciudadanas: 93 561 70 00, donde se ofrece una primera respuesta.
