La red que operaba en Puiggròs y Tàrrega tenía 18 toneladas de hachís

La organización criminal desmantelada el pasado 11 de junio con registros en varias localidades catalanas, entre ellas Puiggròs y Tàrrega, como avanzó SEGRE, es el mayor entramado intervenido por los Mossos d’Esquadra que introducía hachís en Catalunya por vía marítima. La Policía catalana hizo balance ayer de la investigación llevaba a cabo con el Servicio de Vigiliancia Aduanera de Catalunya, con la detención de 40 personas, dos de ellas en Puiggròs; la detección de 19 desembarcos y la incautación de más de 18 toneladas de esta droga. La red estaba formada por dos organizaciones criminales, una de ellas asentada en Málaga, que se habría coordinado con un grupo radicado en Catalunya para llevar a cabo con éxito los desembarcos.

Los Mossos alertaron del aumento de las operaciones de este tipo en Catalunya, que atribuyeron a la presión policial en el sur del Estado. Así, señalaron la preocupación al respecto y dijeron que se destinarán más recursos para combatirlas. De las organizaciones desmanteladas, destacaron que estaban muy jerarquizadas, organizadas y formadas por profesionales, que además usaban armas consideradas de guerra, como fusiles, para garantizar la seguridad de los desembarcos. Asimismo, contaban con una importante capacidad económica, teniendo en cuenta que una embarcación utilizada para el transporte de la droga puede llegar a costar hasta 200.000 euros, y de almacenes para guardar el hachís por toda Catalunya. Al respecto, el jefe del Àrea Central de Crimen Organizado de los Mossos, el inspector Antoni Salleras, señaló que el transporte y la introducción de grandes cantidades de hachís “vuelve a Catalunya” tras el auge de entrada de droga de principios del 2000. “Este escenario despunta más porque la actividad de estas dos organizaciones no la habíamos visto nunca”, constató. Asimismo, señaló que Catalunya “se ha convertido en una zona muy atractiva” para introducir hachís.