La autovía A-2 mejoró sustancialmente la conectividad y la seguridad
Imagen de las obras de construcción de la autovía A-2 a su paso por Anglesola en abril del 1994 y la misma vista en la actualidad.
La construcción de la autovía A-2 fue una obra largamente reivindicada por el territorio que cuando fue una realidad mejoró sustancialmente la conectividad y la seguridad.
Hace años que usuarios y vecinos del Urgell y la Segarra reclaman mejoras en la vía y en Tàrrega piden la construcción de carriles laterales.
Imagen de las obras de construcción de la autovía A-2 a su paso por Anglesola en abril del 1994 y la misma vista en la actualidad.
En estas imágenes recordamos que el tramo de la A-2 a su paso por Tàrrega fue inaugurado en mayo del 1991. La actuación descongestió sustancialmente el tráfico rodado por el interior de la capital del Urgell (la antigua N-II), especialmente de vehículos pesados, hecho que contribuyó a mejorar la seguridad.
Según la prensa local de hace 33 años, la puesta en funcionamiento de la A-2 en Tàrrega evitó el paso por el centro de la ciudad de unos 15.000 vehículos diarios, de los cuales un 33 por ciento eran camiones.
El puente para hacer llegar el agua en Tàrrega fue construido a principios de 1992.
En estas imágenes mostramos también las obras de construcción de otro tramo de la A-2 desde Anglesola hacia Bellpuig en abril del 1994, así como los trabajos de instalación del puente que cruza la A-2 en Tàrrega con la tubería que trae el agua a la ciudad. Se instaló a principios del año 1992. Las dos imágenes publicadas en estas páginas corresponden a los meses de febrero y marzo, y se requirió de grúas de gran tonelaje para mover las enormes piezas.
El puente para hacer llegar el agua en Tàrrega fue construido a principios de 1992.
El puente para hacer llegar el agua en Tàrrega fue construido a principios de 1992.
