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La Granadella: un paisaje transformado por la construcción de más de cuarenta molinos de viento
Vista de la Granadella antes de la construcción de molinos de viento cuya altura supera con creces la del campanario, hasta entonces el punto más alto del pueblo.
La Granadella se convirtió, hace más de una década, en el epicentro de la energía eólica en las comarcas de Lleida. Su término municipal acoge 47 molinos de viento, algunos muy cerca del núcleo urbano. Son más de la mitad de los que funcionan hoy en día en Les Garrigues y uno de cada cuatro de los instalados en toda la provincia. Los primeros que se construyeron en 2011 ya eclipsaron en altura el campanario de la iglesia de la Mare de Déu de Gràcia, conocida también como la catedral de Les Garrigues y hasta entonces el punto más alto del pueblo.
Vista de la Granadella antes de la construcción de molinos de viento cuya altura supera con creces la del campanario, hasta entonces el punto más alto del pueblo.
Los últimos, los de la central eólica de Solans, se pusieron en marcha en 2022 y son mucho más altos. Al preguntar a los vecinos sobre la convivencia con ellos, hay quien echa de menos el silencio y quien asegura que ni siquiera oye girar las aspas. Unos y otros señalan como inequívocos beneficiarios a quienes cobran alquiler por fincas donde se alzan aerogeneradores.
Vista de la Granadella antes de la construcción de molinos de viento cuya altura supera con creces la del campanario, hasta entonces el punto más alto del pueblo.
Por lo demás, no han visto que los ingresos que el ayuntamiento obtiene de ellos hayan supuesto cambios decisivos. El avance de las energías renovables puede significar nuevas transformaciones para esta localidad, esta vez de la mano de proyectos que plantean ocupar grandes extensiones de suelo rústico con paneles solares.
La onstrucción de los primeros molinos de viento en el año 2011. Actualmente son más de cuarenta, y los últimos empezaron a funcionar en 2022.
La implantación de este tipo de instalaciones es algo que este y otros municipios leridanos quieren regular.
